Después de una larga polémica por las dificultades de orden público que atraviesa el país, la Conmebol ratificó que definitivamente la Compa América se jugará en Colombia y Argentina. Será una Copa América muy particular. Se disputará un año después de lo previsto, con la pandemia del covid 19 como indeseable participante, y la compleja situación social de Colombia como escenario.
La doble sede también hace su aporte para esa singularidad, al igual que la triste ausencia de público, que siempre atenta contra el espectáculo. En definitiva, todo cambió desde el anuncio del campeonato allá por 2019. O casi todo, porque el fútbol sigue ahí, a la espera y escondido entre circunstancias que lo exceden.
Hoy, aunque Conmebol monitorea día a día las protestas en Colombia y Argentina necesita mejorar sus preocupantes indicadores sanitarios, la Copa se realizará en estos dos países el tiempo y la forma que se pudo. Desde el 13 de junio hasta el 10 de junio se disputará el certamen más antiguo del mundo y habrá varios partidos imperdibles y muy esperados.
ARGENTINA-URUGUAY
El clásico que tiene más de cien años de historia tendrá una nueva edición en su escenario principal. Entre ambas selecciones suman 29 títulos de América y 31 choques en la Copa, desde aquel 0-0 en el estadio de GEBA en 1916.
Se medirán el 17 de junio en Córdoba, con varios de los mejores jugadores del fútbol mundial. Lionel Messi y Luis Suárez comandarán a dos de los máximos candidatos al título, en un duelo que en los últimos tiempo se tiñó más de celeste y blanco que de solo celeste, más allá de que en el último enfrentamiento fue el conjunto de Oscar Tabárez el ganador en suelo argentino en 2011.
Quizás, aquí se defina al ganador del grupo, que jugaría cuartos y semi en Buenos Aires.
COLOMBIA-BRASIL
El equipo tricolor ante el máximo favorito. Dos de los principales candidatos, por calidad individual y aspiraciones, frente a frente. Jugarán en la cuarta fecha, el 24 de junio en el estadio Metropolitano de Barranquilla. Quizás, sea el partido clave para definir al primero del grupo “norte”, que se asegurará no viajar en medio del certamen, un premio que se adivina muy valioso. Es cierto que la Tricolor no llega bien y que es una incógnita si Reinaldo Rueda podrá recomponer el rumbo rápido, aunque sin dudas será un adversario de peligro para el gran equipo de Tite, campeón defensor y todavía más firme que hace dos años.
ARGENTINA-CHILE
Protagonizaron dos de las últimas tres finales de América y la rivalidad creció a partir de esas definiciones que se pintaron de rojo. Será el partido inaugural de la Copa, el 13 de junio en el estadio Monumental de River Plate. Varios de los protagonistas de aquellos duelos en Santiago y New Jersey estarán una vez más: Lionel Messi, Angel Di María, Sergio Agüero, Arturo Vidal, Alexis Sánchez, Gary Medel... cracks en los últimos años de sus extraordinarias carreras que harán lo que mejor saben : competir.
ECUADOR-PERÚ
En las últimas décadas se convirtió en un clásico y esta vez quizás tenga el valor de una final por la clasificación. Sí, en este grupo también está Venezuela, que se presume como el más débil, pero cualquier tropiezo podría obligar a ganar este duelo a los equipos de Gustavo Alfaro y Ricardo Gareca. Chocarán en el estadio Pascual Guerrero de Cali el 24 de junio con el recuerdo fresco de otro encuentro clave: el de Eliminatorias que será en Quito el 8 de junio.
BRASIL-PERÚ
Que se encuentren los últimos finalistas siempre es interesante. Aquel choque de 2019 del Maracaná dejó buenos recuerdos en ambos, más allá de la victoria local. Por obvias razones para la Canarinha y por la certeza de haber vuelto a los primeros planos por la Bicolor. Luego jugaron un partidazo en Lima por las Eliminatorias, en el que Perú estuvo dos goles por delante en el marcador pero los fallos arbitrales y del VAR no le permitieron ganar los tres puntos. Tiene todos los ingredientes de una revancha espectacular. Jugarán el 18 de junio en Cali.
BONUS TRACK: ¿ARGENTINA-BRASIL?
Es el partido que todos esperan en una Copa América. Y podría darse en la gran final de Barranquilla, si ambos finalizan en posiciones similares en sus grupos. Aunque en Colombia nadie quiere pensar en que el gran clásico regional defina el título en su tierra, el mundo sueña con al menos un duelo mano a mano entre los dos gigantes, tal cual se dio en las semis de 2019. Argentina aspira a la revanche y Brasil a repetir aquella polémica victoria.
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