Pese a que las autoridades y el mismo presidente Iván Duque han calificado como un acto violencia el atentado que sufrieron Lucas Villa, Andrés Felipe Cataño y otra persona sin identificar en el viaducto de Pereira, José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán y esposo de la congresista del Centro Democrático María Fernanda Cabal, calificó como “grave accidente” el ataque con ocho disparos que recibió el profesor y estudiante de la Universidad Tecnológica de la capital de Risaralda.
A través de su cuenta de Twitter, Lafaurie se refirió a los hechos que consternaron al país en la noche del pasado 5 de mayo en el viaducto que comunica a Pereira con el municipio de Dosquebradas, en el que presuntos civiles armados dispararon desde un vehículo contra jóvenes que participaban de las manifestaciones del paro nacional en la ciudad.
El presidente de Fedegán publicó un video de Lucas Villa, anterior a las recientes manifestaciones, en el que él aparece sin la larga barba que lo caracterizaba, y en el cual se atribuía, entre las risas de sus compañeros, haber detenido el tránsito de la capital risaraldense.
“Aquí en plena acción en el paro del 2019, Lucas Villa, quien en días pasados sufrió un grave accidente que lo tiene en UCI en una de las manifestaciones en Pereira. Todo indica que no es un alegre activista como lo han querido mostrar noticieros de Tv”, escribió Lafaurie.
En el video, Villa aparece en el viaducto de la ciudad y muestra una vía sin tráfico en la que solo pasan personas caminando. “Muchos decían que no servía para nada, que era un inútil y aquí estoy, he tapado la vía principal de Pereira. Mami esto es por tí, porque puedo hacerte orgullosa a tí y a toda mi familia, mire como tengo la ciudad”, dice mientras sus amigos se burlan de sus palabras.
El tuit tiene más de 2.000 respuestas en las que se critica que el presidente de Fedegán calificara como “grave accidente” el atentado, otros usuarios le reclaman por lo que entienden como una “justificación” del ataque e incluso otros rechazan el mensaje cuando Villa lucha todavía por su vida tras recibir ocho impactos de bala.
El pasado 5 de mayo, el estudiante se encontraba realizando pedagogía en los buses intermunicipales y en la noche, cuando estaba junto a otros manifestantes al borde la vía, un vehículo particular se estacionó y disparó una ráfaga de tiros en la que tres personas resultaron heridas.
Aunque Villa, de 37 años, continúa con signos vitales, su diagnóstico es reservado y se mantiene en estado crítico en el Hospital Universitario San Jorge de Pereira. Andrés Felipe Castaño, de 17 años, otro de los jóvenes que resultó gravemente herido en el ataque armado indiscriminado, ya despertó tras superar dos cirugías, una tracto abdominal de reparación de daños que representaba alto riesgo.
Horas después, José Félix Lafaurie corrigió su primer trino, sin borrar el previo, con un retweet en el que cambió la palabra “accidente” por “atentado”, al parecer ante las miles de críticas que recibió su primera publicación.
Contrario a la afirmación de Lafaurie, el general Jorge Luis Vargas, comandante de la Policía Nacional, señaló este sábado 8 de mayo que de acuerdo a la información de la institución “Lucas Villa es el símbolo de la manifestación pública y pacífica en esa zona del país”. Según el general, siempre saludaba a los policías, les ofrecía agua y los abrazaba.
El director de la Policía también aumentó a 100 millones de pesos la información que conduzca a la captura de las personas que realizaron el atentado con sevicia contra los manifestantes en el viaducto de Pereira; misma cifra que se ofrece por los autores del homicidio de los patrulleros Edwar Torres y Deybi Mora en Cúcuta.
Lucas Villa es un psicoterapeuta y estudiante de Ciencias del Deporte y Recreación de la Universidad Tecnológicas de Pereira. Según videos difundidos en redes sociales, se caracterizaba por ser una persona carismática, que en medio de las manifestaciones del paro nacional bailó, hizo yoga, cantó y reclamó por el respeto a la vida en el país. Paradójicamente, horas antes del atentado, se le vio decir en un video “nos están matando en Colombia”.