En la mañana de este viernes, 7 de mayo, la Misión de Verificación de Naciones Unidas en Colombia emitió un comunicado frente a las jornadas de manifestaciones, que iniciaron el pasado 28 de abril, que iniciaron en protesta a la reforma tributaria propuesta por el gobierno de Iván Duque.
En la misiva, la ONU en Colombia reconoce actos de violencia en los que se han perdido vidas humanas y, entre ellos, se destaca el uso desproporcionado de la fuerza por parte de las autoridades locales. Esto ya había sido denunciado por Marta Hurtado, portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, quien denunció que policías abrieron fuego contra manifestantes en Cali, Valle del Cauca.
Frente a esto, la organización llama a “que se garantice el derecho a la libertad de reunión pacífica y a la protesta, e insiste que toda acción de la fuerza pública debe observar plenamente la protección y el respeto por los derechos humanos”. Además, de acuerdo con la organización supranacional, habrían elementos dentro del Acuerdo de Paz del Gobierno con la extinta guerrilla de las Farc para ofrecer garantías a la protesta ciudadana.
Pide que la protesta se desarrolle de manera pacífica y, frente a los actos violentos, entre los que se tiene registro de abusos sexuales, el documento exhorta “a la celeridad en los procesos investigativos, de judicialización y sanción”.
Durante el paro nacional, se han presentado incidentes en vías de acceso de insumos e, incluso, la retención de vacunas por parte del Gobierno por desmanes en las principales ciudades del país. Relacionado a esto, el documento pide que se garantice “el libre acceso a insumos alimentarios básicos, la Misión Médica y misiones humanitarias para la población que requiere asistencia en medio de la pandemia”. La misión en Colombia afirma que apoyará esfuerzos en esa dirección.
Finalmente, la ONU observa de manera positiva la agenda de diálogo que estableció el Gobierno nacional para llegar a consensos que desmonten el paro nacional. Sin embargo, la organización espera que las mismas cuenten con pluralidad y resultados. “Espera que estos se lleven a cabo de manera inclusiva y con vistas a obtener resultados concretos que puedan brindar una solución pacífica a la actual coyuntura”, aseveró.
Durante el paro nacional de noviembre de 2019, también se establecieron mesas de diálogo que no llegaron a resultados concretos. Incluso, en varias ocasiones, los organizadores del paro nacional de ese entonces se levantaron de la mesa por falta de consenso.
Este año, el Comité del Paro habla de peticiones que son, más bien, pendientes de la negociación de 2019. “El gobierno nacional ha tenido la posibilidad de atender y resolver los reclamos de las grandes movilizaciones realizadas desde el 21N de 2019 y de los acuerdos incumplidos con el pueblo y sus organizaciones, pero nunca se dispuso a instalar una mesa de negociación y concertación. Al contrario, siempre estigmatizó y actuó con violencia contra los manifestantes”, aseveró la organización.
Finalizando el comunicado, la ONU envía un saludo solidario a las familias y allegados de las víctimas y heridos por la violencia dentro de la protesta, “e invita a Colombia a continuar en el camino hacia la paz y la reconciliación”, culminó la misiva, publicada a primera hora del viernes.
En torno a víctimas, el último reporte de la Defensoría del Pueblo de Colombia habla de 24 víctimas fatales de las manifestaciones. Por otro lado, el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, entidad no gubernamental, habla de al menos 31 muertes.
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