El representante Jim McGovern, copresidente de la Comisión de Derechos Humanos Tom Lantos, en el Congreso estadounidense, se pronunció sobre la situación que se está presentando en Colombia respecto a las manifestaciones, que ya completan seis días, y rechazó rotundamente la violación de derechos humanos que se está realizando por parte de la fuerza pública.
Por medio de su cuenta de Twitter, el funcionario mostró su indignación y manifestó que no es la primera vez que este tipo de actos se han presentado en el país, pues recordó que el exceso de fuerza ha estado presente en protestas anteriores.
“Estoy profundamente preocupado por la brutal respuesta de la Policía Nacional de Colombia (PNC) a las protestas pacíficas durante el fin de semana. Esto es parte de un patrón perturbador de uso excesivo de la fuerza, asesinatos y violaciones de derechos humanos contra manifestantes en noviembre de 2019, septiembre de 2020 y abril-mayo de 2021”, escribió McGovern.
El representante continúo con el rechazo y solicitó al gobierno del presidente Joe Biden aplicar la Ley Leahy, que trata sobre las leyes de derechos humanos de los Estados Unidos en las que se prohíbe, al Departamento de Estado y al Departamento de Defensa del país, brindar asistencia militar a unidades de fuerzas de seguridad extranjeras que violan los derechos humanos con impunidad
“La protesta pacífica y la libertad de expresión deben respetarse en todas partes. La ayuda estadounidense a la PNC (Policía Nacional) necesita fuertes condiciones y protecciones de derechos humanos. Deberíamos aplicar la Ley Leahy. No hay ayuda estadounidense a las unidades antidisturbios del ESMAD colombianas que cometan graves violaciones de derechos humanos”, añadió.
Estas pronunciaciones se dan como respuesta a las publicaciones hechas por el Relator Especial sobre el derecho a la libertad de reunión pacífica y de asociación, Clément Nyaletsossi Voule, ente de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, quien también mostró su preocupación por los recientes enfrentamientos que se están presentando a lo largo del territorio colombiano.
“Estoy alarmado por informes sobre el uso excesivo de la fuerza por fuerzas de seguridad contra manifestantes en Colombia -Bogotá, Cali y Popayán-. Hay 9 muertos desde el 28/04. Dichas fuerzas deben abstenerse del uso excesivo de la fuerza y los responsables rendir cuentas”, escribió en su cuenta oficial de Twitter.
No obstante, también fue claro que el ataque a la fuerza pública no debe presentarse e hizo un llamado para que cese la violencia por parte de ambas partes.
“También estoy alarmado por el número de policías heridos y pido a los responsables que se abstengan de cualquier tipo de violencia”, añadió.
Finalmente, reiteró el llamado para que las manifestaciones que se presenten no sean tratadas con exceso de fuerza, pues resaltó que el derecho a la protesta debe ser respetado y quienes estén a cargo del acompañamiento de las marchas tienen que ser personas debidamente capacitadas para dicho fin.
“En general, no se deberían utilizar fuerzas militares para gestionar manifestaciones. Insto a las autoridades colombianas a facilitar el derecho a la reunión pacífica con fuerzas de seguridad adecuadamente capacitados para este fin”, concluyó.
Más llamados de Jim McGovern
No es la primera vez que el representante estadounidense pide estudiar minuciosamente los acuerdos de ayuda militar que hay entre Estados Unidos y Colombia. El año anterior, cuando se destapó el escándalo de espionaje militar en contra de al menos 130 personas, entre las que se encontraban defensores de derechos humanos, periodistas y demás, McGovern solicitó que la ayuda militar debería suspenderse mientras se realizaba una nueva revisión.
“Ante esta última revelación, le he pedido a los Estados Unidos que suspenda la ayuda militar a Colombia y que haga una evaluación de arriba a abajo, centavo por centavo, de la ayuda militar y de inteligencia. Uno de los problemas en Colombia a lo largo de los años es que, ante un mal comportamiento, no ha habido consecuencias. Si no hay una consecuencia, no hay incentivos para que el gobierno o la fuerza pública cambie su manera de operar”, dijo en una entrevista hecha el 20 de mayo del 2020 por WOLA (Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos).
En ese momento se dijo que para el año 2020, la ayuda militar y policial de los Estados Unidos a Colombia ascendería a los 330 millones de dólares.
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