Detectan depósito de explosivos en Chocó que presuntamente pertenecía al ELN

Los militares encontraron 8.5 kilogramos de explosivos distribuidos en 17 barras, que serían del frente Cacique Calarcá del mencionado grupo armado.

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25/04/2021 Militares de las Fuerzas Armadas de Colombia.

Un militar ha muerto y cuatro más han resultado heridos en Arauquita, departamento de Arauca, cerca de la frontera con Venezuela, en un ataque de guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

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25/04/2021 Militares de las Fuerzas Armadas de Colombia. Un militar ha muerto y cuatro más han resultado heridos en Arauquita, departamento de Arauca, cerca de la frontera con Venezuela, en un ataque de guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN). POLITICA SUDAMÉRICA COLOMBIA FUERZAS ARMADAS DE COLOMBIA

En la tarde de este martes 27 de abril, tropas del Grupo Liviano de Caballería número nueve del Ejército Nacional, en coordinación con la Policía Nacional, ubicaron y destruyeron un depósito ilegal de explosivos en Tadó, Chocó. El hallazgo se hizo específicamente en un sector conocido como Madre Vieja, en medio de operaciones militares adelantadas por la fuerza pública, que estarían relacionadas a una alerta temprana emitida por la Defensoría del Pueblo.

Según las autoridades, encontraron 8.5 kilogramos de explosivos distribuidos en 17 barras, que presuntamente pertenecen al frente Cacique Calarcá del Ejército de Liberación Nacional (ELN). Así mismo, no se descarta que una comisión del frente Ernesto Che Guevara, liderado por alias ‘Shumager’, del mismo grupo armado, también fuera a hacer uso del material.

Una vez se presentó el hallazgo, los militares llamaron a miembros del Equipo de Explosivos y Demoliciones (Exde) del mismo Ejército para que verificaran el área y procedieran a destruir los artefactos de forma controlada.

“Este depósito ilegal fue ubicado en el sector conocido como Madre Vieja, en el municipio Tadó, donde fueron encontrados 8.5 kilogramos de explosivos. Estos fueron destruidos de forma controlada y segura por parte de un Equipo de Explosivos y Demolición (Exde), quienes destruyeron el material e hicieron registro perimétrico, con el fin de descartar la ausencia de otros posibles explosivos en el sector”, explicó el Ejército en un comunicado de prensa.

Los militares aseguran que continuarán realizando operaciones de acción ofensiva y control territorial en todo el país con el propósito de detener posibles acciones violentas de los grupos armados organizados que operan en el país.

Es importante recordar que, en el caso particular de Chocó, este departamento es una de las zonas del país con los panoramas más críticos por el conflicto armado. Según las autoridades, además del ELN, en este territorio hacen presencia las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), también conocidas como el ‘Clan del Golfo’, el grupo narcoparamilitar ‘Los Caparros’ y las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc). Ellos se disputan el territorio porque este es un corredor estratégico para desarrollar actividades relacionadas al narcotráfico.

Así mismo, en el departamentos hay altos índices de delincuencia común. Los grupos urbanos se dedican al hurto, el microtráfico y, en muchos casos, terminan colaborando con estructuras criminales más grandes.

Los civiles que habitan en este sector del país son víctimas de diferentes modalidades de violencia. Algunos de estos son ataques indiscriminados, en los que corren riesgo tanto los adultos como los menores de edad. Estas personas están expuestas a ser amenazadas, asesinadas, caer en el reclutamiento forzado, trabajos comunitarios obligatorios y ser víctimas de extorsiones. En ocasiones, los pueblos también son sometidos a confinamientos y tienen limitaciones en el acceso a los servicios básicos.

La situación que atraviesa Chocó por cuenta de recrudecimiento de la violencia es tan grave que, a inicios de abril, durante la Semana Santa, Monseñor Juan Carlos Barreto Barreto, Obispo de Quibdó, y Monseñor Mario de Jesús Álvarez Gómez, Obispo de Istmina – Tadó, emitieron un comunicado titulado “Cese el pecado, cese el fuego”, en el que piden a los grupos armados no atacar a los civiles.

Los sacerdotes propusieron a los grupos armados cesar el fuego durante 100 días, tiempo que sería utilizado para “concretar acuerdos humanitarios”. Los religiosos aseguran que, esto es necesario para avanzar en el camino de la paz y así detener el sufrimiento de los más vulnerables en este conflicto, sin embargo hasta el momento la misiva no tiene respuesta.

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