Una dolorosa despedida que al parecer ninguno de los televidentes de la novela de RCN llamada ‘Enfermeras’ quería ver. La muerte del personaje conocido como ‘Coco’, un camillero del hospital Santa Rosa que se caracterizaba por ser un sujeto alegre y hablador, protagonizado por el actor Federico Rivera, se dio luego de un trágico accidente de tránsito al haber aceptado manejar la moto de Álvaro, que presentaba fallas y al estrellarse contra un automovil.
Luego del sucedo, Héctor, quedó en un estado crítico pues aunque no falleció, quedó con muerte cerebral. Un estado en el que se pierde permanente de la actividad cerebral. Como resultado, el paciente no puede respirar o mantener cualquier otra función vital por su cuenta, y pierde de forma permanente toda consciencia y capacidad para el pensamiento.
La persona que diagnostican en esta condición no responde a ningún estímulo. Ningún tratamiento puede ayudar, y una vez que se confirma el diagnóstico, se considera que el sujeto está legalmente muerto aunque sus órganos puedan seguir en funcionamiento por métodos artificiales (como respiradores y fármacos) que pueden mantener temporalmente la respiración y el latido cardíaco incluso cuando cesa toda la actividad cerebral.
Dado el diagnostico de ‘Coco’ los especialistas del hospital fueron realistas y aseguraron que el camillero no regresaría del estado en que se encontraba, por lo que insistían en cumplir los deseos de su querido amigo antes de entrar al quirófano: donar sus órganos a quienes lo necesitan.
El capitulo de la telenovela dejo abierto el debate sobre desconectar a un ser querido y la donación de los órganos después de la muerte. Pues justamente, los resultados arrojaron que el riñón de Héctor era el único compatible con la otra mujer que se accidentó y que se encontraba al borde de la muerte.
Dado los deseos de Héctor y que sus órganos podrían salvar la vida de la mujer accidentada, la familia tomo la difícil decisión de desconectarlo del respirador artificial y definitivamente despedirse de ‘Coco’.
En Colombia de acuerdo con la ley los ciudadanos deberán donar sus órganos cuando fallezcan a menos que en vida manifiesten su negativa a hacerlo, según la ley sancionada en el 2016.
“Toda persona puede oponerse a la presunción legal de donación expresando su voluntad de no ser donante de órganos y tejidos mediante un documento escrito que deberá autenticarse ante notario público y radicarse ante el Instituto Nacional de Salud (INS)”, señaló la norma.
Pese a esto, según cifras oficiales del Instituto Nacional de Salud, con corte a junio del 2020, el número de donantes de órganos bajo el protocolo de muerte cerebral tuvo una disminución del 47 % en relación con el primer semestre de 2019, cuando se realizaron 207 trasplantes vs. 109 en 2020, debido a la crisis sanitaria del coronavirus.
SEGUIR LEYENDO