Gobierno se compromete a llevar energía eléctrica a más de 1.300 familias indígenas de la Alta Guajira

Este 26 de abril, el Gobierno nacional dio a conocer que junto al Ministerio de Minas y Energía, el Instituto de Promoción y Planificación de Soluciones Energéticas (IPSE) y la Gobernación de La Guajira desarrollaron una jornada de socialización en la cual informaron sobre la puesta en marcha del proyecto que busca la interconexión eléctrica de más de 1.300 familias de 53 localidades indígenas, ubicadas entre Puerto Bolívar y el Cabo de la Vela.

De acuerdo con información de la administración nacional, la iniciativa, que consistirá en la construcción de una línea de transmisión de 70 kilómetros y redes de distribución local, se desarrollará en dos fases y tendrá una inversión que supera los $13.200 millones de pesos.

“Proyectos como este nos permiten mejorar de forma integral la calidad de vida de las familias y seguir avanzando en nuestra meta de llevar el servicio de energía, por primera vez, a 100.000 hogares al 2022, la cual ya hemos logrado en un 50 %. Además, la segunda fase de este proyecto se financiará con recursos de las regalías, demostrando que los aportes del sector minero-energético se convierten en obras que transforman vidas, apoyando también la reactivación sostenible y el cierre de brechas en las regiones de Colombia”, señaló el viceministro de Energía, Miguel Lotero, durante el evento de socialización.

Asimismo, Sandra Barliza, representante de la comunidad Leche Mana, expresó que, “la llegada de la energía nos genera miles de emociones. Lo vemos como positivo porque no vamos a cambiar nuestra cultura, sino que vamos a tener por fin la posibilidad de tener electrodomésticos como una nevera para poder tomar agua fría y mejorar la economía impulsando el turismo. Son muchos los beneficios, es un cambio de vida”.

La socialización contó además con la participación del director del IPSE, José David Insuasti; el gobernador de La Guajira, Nemesio Roys; el alcalde de Uribia, Bonifacio Enríquez; la secretaria General de Dispac (empresa contratista), Ana María Yepes, y los representantes de 13 comunidades indígenas, quienes conocieron los detalles de este proyecto.

En otras noticias sobre el departamento de La Guajira, comunidades que viven en los desiertos de Riohacha, reportaron a Noticias Caracol la desaparición y sequía estrepitosa de sus reservorios de agua a causa de la extrema sequía que se ha presentado en las últimas semanas.

El noticiero, que visitó las rancherías, fue testigo de la muerte de los animales que pertenecen a las comunidades, ya que no tienen agua para ellos. Asimismo, Ingrid Epieyú, una de las afectadas le afirmó al medio que, “con esta sequía, los animales se nos están muriendo y tratamos de coger poca agua para que los animales tomen, toca comprar agua para beber”, indicó la mujer.

Helena Pérez Pushaina, perteneciente a la comunidad wayuu, afirmó que la situación no es fácil pues, “consumimos el agua del jagüey y en esa agua se bañan los goleros (gallinazos), se meten los puercos, nos tenemos que bañar con eso y lavar con eso”.

Desde la Oficina de Gestión de Riesgo de La Guajira, afirmaron que se encuentran monitoreando la situación y que los municipios de este departamento ya están reportando a la escasez de agua, a los cuales están respondiendo con los vehículos cisterna.

Mientras, el pasado 5 de marzo la alcaldía entregó 25 tanques de almacenamiento de agua potable con capacidad de 5000 litros, a igual número de comunidades indígenas comenzó a entregar la administración del municipio de Barrancas, que va a mejorar el nivel de vida de estas comunidades

Los tanques fueron empotrados como especie de albercas suspendida lo que permite que el preciado líquido salga con mayor fuerza como también impide que se contamine con facilidad.

Esta obra fue gestionada por el alcalde Iván Mauricio Soto Galán; acompañado de su equipo de gobierno, que lograron implementar acciones para afrontar la calamidad pública por sequía en este territorio.

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