Los habitantes del municipio de Nuquí, Chocó, vienen viviendo una ola de violencia que no ha cesado en los últimos años. Pero durante durante estos días esta parte del departamento ha registrado el asesinato de varios líderes sociales.
Las últimas víctimas de esta violencia fueron Yarley Margarito Salas y José Riascos Córdoba. El primero era un conocido guía turístico. Y el segundo, era inspector de la Policía. Hasta el momento no se han esclarecido los hechos, pero se sabe que hombres armados entraron a la casa de Riascos Córdoba y lo asesinaron. En el caso de Margarito Salas, por el momento se conoce que unas personas le dispararon y, pese a que alcanzó a llegar a un centro de salud, falleció poco después.
De acuerdo con información de Indepaz, Margarito Salas era “reconocido por desempeñarse como guía comunitario de La Batea. También realizaba labores de investigación en apoyo a las parcelas de monitoreo de biodiversidad”.
Esta entidad anunció el asesinato de este líder comunitario por medio de su cuenta de Twitter. En este trino se menciona que los posibles responsables de este homicidio pueden ser grupos paramilitares, como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, como miembros de la guerrilla del ELN.
Según información de Noticias Caracol, Yefer Gamboa, alcalde de Nuquí, dijo que en el caso de Clauder Cardona, comandante de Policía de Chocó, fue atacado “al parecer, por unos sujetos del Clan del Golfo que llegan a este corregimiento, ubican a estas dos personas en sus residencias y, sin mediar palabra, dispararon contra ellos”.
Por otro lado, según las autoridades creen que estos dos asesinatos están relacionados con la la captura de alias “Chicho”, posible encargado de las finanzas de la subestructura Pacífico del Clan del Golfo. Su detención se llevó a cabo en el corregimiento de Arusí hace unos días, el mismo lugar donde fueron asesinados Margarito Salas y Riascos.
Además, Gamboa, en diálogos con Noticias Caracol, añadió que hasta el momento se desconocen los “móviles del asesinato. Lo rechazamos rotundamente”.
De acuerdo a cifras de Indepaz, en lo que va de este año han sido asesinados 46 líderes y defensores de Derechos Humanos en Colombia. Y, desde hace varios días, en el municipio de Riosucio hay alerta por el reclutamiento de niños, niñas y adolescentes por parte de los diferentes grupos armados que operan en el departamento chocoano.
Frente a esto último, varios jóvenes fueron evacuados por riesgo de ser víctimas del reclutamiento forzado por parte de la guerrilla del ELN o por miembros del grupo paramilitar Clan del Golfo.
Desde el año pasado la Defensoría del Pueblo emitió una alerta tempran, donde se documentó el riesgo al que están expuestas más de 61.000 personas en Carmen del Darién y Riosucio, especialmente de las comunidades negras e indígenas y de los consejos comunitarios, por la presencia del Clan del Golfo y el ELN.
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