En alerta se declararon la Superintendencia de Industria y Comercio, los ministerios de Salud, Industria y Comercio, y Agricultura, por el aumento injustificado de precios de medicamentos así como de productos de primera necesidad en momentos del tercer pico de la pandemia en el territorio nacional.
Con respecto a los medicamentos destinados a paliar los efectos de la covid-19, el gremio médico de Barranquilla elevó la queja a las autoridades pertinentes por el repentino incremento de medicamentos como el Midazolam.
De acuerdo con declaraciones del dirigente gremial Dieb Maloof, presidente de la Clínica Internacional de la Misericordia, este medicamento tenía un costo de $1.000 pesos por cinco miligramos, pero luego de la Semana Mayor se encuentra en $5.000.
Necesitamos hacer algo organizado, un frente común para comprar en volúmenes importantes y a precios razonables los medicamentos necesarios para superar esta situación.
Las declaraciones de Maloof aglutinan el sentir del gremio médico de Barranquilla que enfrenta una situación de aumento de casos, un potencial colapso de la red hospitalaria y el incremento de precios que dificulta la adquisición de medicamentos para paliar los síntomas causados por la enfermedad.
Lo que agrava la situación, de acuerdo con Maloof, es que el cuerpo médico está tomando mejores ofertas laborales en la ciudad de Medellín, que se encuentra en dificultades por la carencia de personal de la salud para atender la emergencia provocada por el virus.
“Muchos están renunciando para tomar atractivas ofertas de trabajo en Medellín, donde pagan más. Cometen ese error por ganarse un peso más, cuando aquí tenemos esta prisa en Barranquilla de atender pacientes Covid. Estamos sumergidos todos en un desazón, donde cada uno de los actores nos debemos unir para buscar una situación colectiva”, declaró Maloof.
Pese a esta situación, tanto la alcaldía de Barranquilla como la secretaría de Salud del departamento de Bolívar habilitaron 200 camas más en hoteles de la ciudad, destinadas para enfermos de atención no prioritaria.
Cabe señalar que la capital del Atlántico es la primera en Colombia con mayor disponibilidad de UCI con 811 en total.
De otra parte, con respecto al aumento de precios en productos esenciales, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística reportó aumentos que sobrepasan el 50% en elementos básicos de la canasta familiar, por lo que demandó una acción coordinada para contrarrestar este efecto en momentos de aislamientos en distintos departamentos de Colombia.
A saber, los ejemplos más destacados son: en Bogotá el precio del brócoli aumentó en un 127%; en Medellín, el tomate chonto en un 41%; en Cali, la zanahoria en un 142%; en Barranquilla, el apio en un 74%; en Pereira, el limón en un 57%; y en Bucaramanga, la cebolla cabezona en un 41%.
Ante esta situación, tanto las carteras de Comercio como de Agricultura y la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos fijarán precios máximos de venta al público para aquellos productos que se consideren de primera necesidad, en aras de contrarrestar la especulación de los últimos días.
La Superintendencia exigió que los gobernadores y alcaldes del país respalden las funciones de inspección, vigilancia y control, así como reporten a la entidad todas las variaciones significativas y atípicas en los precios de los productos y medicamentos en el país.