La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, se volvió a referir a los hechos de violencia e inseguridad que vienen azotando desde las últimas semanas a la localidad de Sumapaz, al suroriente de la capital. Pese a lo dicho por el Ministerio de Defensa, la mandataria insiste en que los culpables son miembros de las disidencias de las Farc.
“En Sumapaz asesinaron a dos ciudadanos. Entre otras cosas, uno de ellos desmovilizado. Ahí vecinito, en La Uribe, Meta, asesinaron a otro. Fueron ciudadanos cuyo pecado fue creer en la paz, a quienes la SAE del Gobierno nacional les había dado una finca, entregada por las Farc a las víctimas del Sumapaz para que sembraran. Ellos confiaron en el acuerdo”, aseguró López en la mañana de este miércoles, durante una entrevista con Blu Radio.
Según lo relatado por la mandataria, los criminales pertenecen a distintos grupos de disidencias y llegaron desde Guaviare a esa zona del Meta, que limita con Sumapaz, por lo menos hace un mes. Sin salir de la misma, aseguró, se han dedicado a intimidar a los habitantes de la localidad asesinando de manera pública a quienes se niegan a ceder ante las amenazas.
En sus palabras, “los citaron, una disidencia a uno, otra al otro. Esos ciudadanos, los tres, se negaron a ir. No salieron del Sumapaz. No fueron a cumplir la cita que les pusieron las disidencias en La Uribe. Como no fueron a cumplir la cita, esas disidencias llegaron acá al Sumapaz y los mataron a sangre fría, a balazos delante de los hijos”.
Lo preocupante de la situación, agregó, es que a pesar de que dichos asesinatos se presentaron hace casi un mes, la Fiscalía todavía no ha llegado hasta la localidad para atender las denuncias, a pesar de que esta asegura que sí está investigando los hechos. “El cadáver lo trajimos nosotros, con la familia, desde La Uribe Meta y desde el Sumapaz. Un mes después nos dice la Fiscalía que solo debemos creer en sus investigaciones. ¿Cómo vamos a creer si ni siquiera han ido al Sumapaz?”, sentenció la alcaldesa durante su intervención en la emisora.
La mandataria viene señalando la presencia de grupos disidentes en esa región desde inicios de marzo, lo que la ha llevado, incluso, a chocar con el ministro de Defensa, Diego Molano. Hace dos semanas, el funcionario aseveró que, “no compartimos de ninguna manera el argumento de que es el incumplimiento de los acuerdos de paz lo que genera violencia en la sabana de Bogotá o el Sumapaz”. A la voz del funcionario se unió la del comandante de la Brigada XIII del Ejército, general David Gómez, quien señaló que, contrario a lo dicho por López, “en Cundinamarca no hay grupos armados organizados, no hay disidencias de las Farc”.
Eso tras un consejo de seguridad regional en el que participó el Gobierno nacional, la Gobernación de Cundinamarca, las alcaldías de los municipios de la sabana de Bogotá y la cúpula militar. Allí se acordó, entre otras cosas, el envío de 190 uniformados del Ejército Nacional y la construcción de un nuevo fuerte de Carabineros por parte del Ministerio de Defensa y la Policía en un lote proporcionado por la Alcaldía de Bogotá.
“No hay presencia de la policía en Sumapaz, solo hay Ejército y le agradecemos mucho al Ejército la labor que hace. Sin duda a lo largo de estos años ha garantizado que la gente de Sumapaz pueda respirar en paz, pero se necesita presencia permanente de la policía”, dijo al respecto la alcaldesa López.
Igualmente, se decidió reforzar la presencia del Ejército en todo el corredor de Huila, Meta, Cundinamarca y Bogotá, “para evitar que se vuelva a convertir en un corredor de criminalidad; este debe seguir siendo un corredor para la producción campesina”, según la mandataria. De ello se encargará la Brigada XIII.
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