“No creo que ella tenga el corazón para haberla botado, yo creo que ella la regaló”, expareja de la mamá de Sara Sofía rompe silencio

La Fiscalía investiga la aparente desaparición forzada de la niña Sara Sofía Galván, de 23 meses de edad, de la que no se tiene el menor rastro de su paradero desde el pasado 15 de enero en Bogotá, cuando se la llevó la mamá, quien no tenía su custodia. Las autoridades manejan dos hipótesis: su muerte y posterior lanzamiento de su cuerpo al río Tunjuelo, en el sur de Bogotá, y la de que fue víctima de tráfico de menores.

La desaparición se conoció gracias a la denuncia de la tía de la menor de dos años, Xiomara Galván, y quien tenía su custodia. La mujer cree que podría tratarse de un caso de desaparición forzada o tráfico infantil.

Según cuenta Xiomara, ella estaba a cargo de Sara desde septiembre de 2020 porque su hermana, Carolina Galván, “tenía descuidada” a la pequeña. Madre e hija compartían tiempo ocasionalmente, pero la niña siempre volvía con su tía.

Sin embargo, todo cambió el 15 de enero de este año, cuando Carolina se llevó a Sara y no se tuvo más información sobre su paradero. Los días pasaron y Xiomara insistía para ver a la niña, pero Carolina se limitaba a decirle, a través del teléfono, que ambas estaban bien.

“Yo enfrento a mi hermana, le pregunto por la niña y ella manifiesta que le dieron comida, la pusieron a dormir, que cuando fueron a ver la niña ya no respiraba. Que cogieron a la niña, la envolvieron en una cobija, la metieron en una bolsa negra y la arrojaron al caño de Tunjuelito”, detalló la tía de la menor.

Durante el testimonio de Galván, una persona fue mencionada con insistencia: Nilson Díaz, entonces pareja de Carolina Galván, mamá de Sara Sofía. Según la tía de la menor, el hombre es un proxeneta, la indujo a la prostitución y la explotaba sexualmente.

Tras los señalamientos, este miércoles 17 de marzo, Díaz, en diálogo con Blu Radio, reveló detalles que podrían ser claves para dar con el paradero de la pequeña.

Según detalló el hombre, cuando Carolina se llevó a Sara Sofía de la casa de su hermana, se dirigió a su casa, donde vivía con sus cuatro hijos y al verla, Díaz le insistió a la mujer que la regresara a donde su hermana, pues él no tenia planes para hacerse cargo de la menor, sin embargo, ella se negó. Por esa razón, cuenta Nilson, su relación sentimental terminó ese día.

“Teníamos una relación sentimental, hasta el 15 de enero que ella llevó la niña a la casa y me quería recostar la obligación a mí. Soy papá y mamá de cuatro niños, no me encontraba con un trabajo fijo ni estable”, aseguró al medio, agregando que a finales de enero fue la última vez que vio a la niña y se encontraba en buen estado de salud.

Asimismo, manifestó que “la niña duró aproximadamente en la casa, unos ocho o diez días, bien. Compartía con mis hijos. Ella (Carolina) salía a trabajar y yo era el que veía por los cuidados de la Sara Sofía”.

Respecto a las acusaciones que ha formulado la tía de la menor, Díaz dejó en claro que Carolina ejercerse el trabajo sexual por decisión propia.

“Proxeneta es una persona que tiene que cuidar y velar por los derechos de ellas, estar pendiente de ella. Yo en ningún momento fui proxeneta con ella, de antemano, antes de conocerla, andaba en cuentos. A veces se quedaba con otros hombres para no quedarse en la calle”, manifestó Díaz.

Por último, el hombre deseo la pronta aparición con vida de la menor, pues según contó, la mamá de la menor le dijo que la había regalado a una persona de quien no tenía ningún tipo de contacto para ubicarla.

“No creo que ella tenga el corazón para haberla botado, yo creo que ella la regaló. Al verse en estas circunstancias, en Patio Bonito y de no tener cómo mantenerla, creo que la regaló porque no aparece con la familia. No sé qué motivo tendría ella. No creo que la niña esté muerta. No creo esa versión. A nadie se le pasa por la cabeza eso de tirar a la niña como un perro. Me parece inaudito, eso no lo hace nada”, afirmó la expareja de Carolina.

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