A pesar de la reunión entre Iván Duque y Rodrigo Londoño continúan los enfrentamientos

Aunque el diálogo entre el presidente y el líder político había salido aparentemente bien, después se evidencio que aún prevalece la falta de confianza de las partes

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El presidente de la República de Colombia, Iván Duque, confirmó, en la noche de este viernes 12 de marzo, que en efecto tuvo un encuentro amigable con el líder del Partido Comunes, Rodrigo Londoño, ‘Timochenko’. El dato se dio a conocer mientras el mandatario daba un reporte del avance de la política de ‘Paz con Legalidad’.

“Hace exactamente dos días tuvimos una muy importante reunión que fue convocada por la Oficina de Observación de Naciones Unidas en nuestro país. Ahí me acompañaron el alto Comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, el consejero para la Estabilización, el doctor Emilio Archiva y la jefe de Gabinete de la Casa de Nariño, María Paula Correa y nos encontramos también con dirigentes tanto del Partido Comunes como con personas que están trabajando en el proceso de reincorporación”.

Aunque el presidente nunca se refirió a los líderes de las extintas Farc con los que se encontró en el evento, Noticias Caracol reportó que se trataría del jefe de ese partido, Rodrigo Londoño, ‘Timochenko’ y Pastor Alape. Esta es la tercera vez que Duque se reúne con Londoño.

A pesar de que el ambiente en el encuentro parecía lograr el cometido, las reacciones de este fin de semana deshicieron ese camino. Pues, luego de la entrevista que Archila dio una entrevista en Semana Tv, se dieron reacciones negativas ante las declaraciones.

El funcionario del Gobierno mencionó que en la reunión uno de los puntos importantes para el presidente fue poner sobre la mesa “la relevancia de que tengamos la información que las Farc pudieran haber tenido sobre las bandas de narcotraficantes”, por lo que desde el gobierno se intento hacer el dialogo en un ambiente de confianza para que se manejará “en el formato apropiado para ese tipo de información”.

Lo que generó malestar a los líderes de los Comunes que entendieron de las declaraciones que ellos habían aceptado dar esa información. Por lo que a través de twitter publicaron un mensaje donde rechazaban las declaraciones de Archila.

“Rechazamos la falaz e irresponsable declaración de Emilio Archila en la Revista Semana en la que asegura que pactamos con el Pte. Duque entregar información sobre bandas de narcotráfico. El problema de las drogas se soluciona implementando el Acuerdo de Paz”, señaló ‘Timochenko’.

Por su parte Alape aseguró al portal de la Silla Vacía que “Quedamos sorprendidos cuando vimos lo que dijo el Gobierno y eso nos genera muchas preocupaciones, porque ya nos producen desconfianza. Ahora nos va a tocar, en cada diálogo que tengamos, tener un acta, una relatoría y que todo quede por escrito”.

Sin embargo, esta reunión y las declaraciones no sólo revelan la desconfianza entre las partes. Sino las reacciones negativas tanto del uribismo como de otros miembros exfarc que no se enteraron de la reunión.

Por ejemplo, el mismo sábado la senadora uribista María Fernanda Cabal, menciono que “no podemos repetir el secretismo de Santos con las Farc”, un comentario que podría señlalar ‘traición a su bancada.

Y desde el otro ángulo, Benedicto González, excongresista de Farc a quien expulsaron del partido, publicó una dura carta donde dijo que tanto Timchenko como Alape no representa a todos los firmantes del acuerdo.

“Timochenko y Alape no representan al universo de firmantes del Acuerdo de Paz, de modo que cualquier compromiso al que hayan podido llegar con relación al polémico tema (el dar información sobre rutas y narcotraficantes), o cualquier otro tema, solo los compromete a ellos y a quienes siguen sus orientaciones. No se firma un acuerdo de paz para quedar reducido a informante (sapos) de los organismos del Estado colombiano”, anotó González.

Lo que sigue mostrando las rupturas de los exfarc, pues hace una semana la senadora Victoria Sandino y el excomandante Joaquín Gómez, anunciaron la creación de un nuevo grupo de excombatientes que siguen firmes con el proceso pero no con el partido.

Por ello, aunque el panorama parecía ser positivo ante el acercamiento de las partes para poder avanzar en confianza y la implementación del acuerdo de paz, lo único que evidencio fue desacuerdos y distanciamientos. Tanto del Gobierno con los excombatientes y al interior de sus bancadas.

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