Madres de falsos positivos se plantaron por la verdad frente a la JEP en Bogotá

A las 9:00 am. hasta las 11:00 am. madres de víctimas de esos crímenes cometidos por miembros del Ejército Nacional, mal llamados ‘falsos positivos’, se reunirán en un plantón frente a la sede de la JEP en Bogotá, para rendir un homenaje a sus familiares, exigir verdad y posteriormente entregar un informe a la Comisión de la Verdad y la Jurisdicción Especial para la Paz.

El informe se titula ‘Unidas por la memoria y la verdad’, que fue realizado por la Asociación de Madres de Falsos Positivos MAFAPO de Bogotá y Soacha. El documento recoge el proceso de lucha que han llevado estas mujeres durante más de 13 años en la búsqueda de la verdad sobre sus familiares victimizados.

Según la Comisión de la Verdad, en el documento también se expondrán nuevos casos de ejecuciones extrajudiciales que las madres asociadas han logrado recoger y documentar durante todo ese periodo detrás del clamor de justicia por sus hijos.

El evento formal de entrega del informe se realizará a las 3:00 pm. de este 16 de marzo y podrá seguirse a través de las redes sociales de la Comisión de la Verdad y la asociación MAFAPO. Entre los asistentes estarán Helena Storm, embajadora de Suecia en Colombia; Jacqueline Castillo, representante legal MAFAPO y Salomé Gómez Corrales, coordinadora del Grupo de Trabajo de Género de la Comisión de la Verdad.

El plantón, que en Bogotá iniciará a las 9:00 am. también se replicará en otras ciudades del mundo. De acuerdo con la asociación de Madres de Falsos Positivos en Melbourne, Australia; Londres, Inglaterra; Barcelona, España; Buenos Aires, Argentina; Montreal y Vancouver, en Canadá, también se realizarán conmemoraciones a las víctimas de este crimen.

Con la premisa “Tengo derecho a la verdad”, cientos de hermanas, madres y familiares de las víctimas de ejecuciones extrajudiciales convocaron a acompañar este evento y a exigir avances en la judicialización de los responsables, así como el esclarecimiento de los hechos.

La cifra del número de casos de ejecuciones extrajudiciales cometidas por el Ejército Nacional entre los años 2002 y 2008 cambió recientemente, luego de que la JEP, en su auto 033, señalara que el cruce de bases de datos de diferentes organizaciones e instituciones dio como resultado 6.402 víctimas de estos crímenes.

La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) reveló, el pasado 18 de febrero, que por lo menos 6.402 colombianas y colombianos fueron víctimas de muertes ilegítimamente presentadas como bajas en combate. Si bien las cifras que había entregado la Fiscalía y organizaciones como el Sistema Penal Oral Acusatorio (SPOA), el Observatorio de Memoria y Conflicto del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) y la Coordinación Colombia Europa Estados Unidos (CCEEU), son inferiores a las presentadas por la JEP, todas coinciden en algo, y es que el período más álgido de este fenómeno se vivió entre 2002 y 2008.

“Las distintas fuentes oficiales y no gubernamentales identificaron el periodo de 2002 a 2008 como el de mayor número de víctimas. El resultado muestra que, durante esta etapa se registró el 78% del total de la victimización histórica. Las fuentes también coinciden en que el fenómeno macrocriminal cayó drásticamente en 2009, al pasar de 792 víctimas en 2008 a 122 casos reportados en 2009″, informó el tribunal de paz.

Así mismo, evidenciaron que frente al crecimiento de casos de falsos positivos, mientras que en 2001 se registraban 74 víctimas, en 2002 este número aumentó a 473, equivalente a más de seis veces lo reportado en el año inmediatamente anterior. Mismo año en el que Álvaro Uribe Vélez llegó a la Presidencia de Colombia con su estrategia de la Seguridad Democrática.

Los ‘falsos positivos’, uno de los capítulos más oscuros del conflicto armado colombiano, involucran a unos 1.500 militares que engañaban a civiles para asesinarlos, hacerlos pasar como subversivos caídos en combate, presentar mejores resultados a sus superiores y, de esta forma, obtener permisos, premios y otros beneficios.

Según los informes presentados por las organizaciones de víctimas ante la Sala de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz, las brigadas del Ejército Nacional que durante los años en cuestión fueron catalogadas como las ‘más efectivas’ presentando bajas en combate, en realidad estaban realizando ejecuciones extrajudiciales o ´falsos positivos’.