A medida que avanza la temporada de invierno en el país, las precipitaciones se siguen intensificando y causan estragos. Este lunes, 15 de marzo, las autoridades de Bogotá reportaron que, especialmente al norte de la ciudad, en las localidades de Suba y Usaquén, las fuertes lluvias ocasionaron grandes encharcamientos y caídas de árboles, que han afectado el fluido eléctrico en esa zona.
El Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger) confirmó que, junto al Cuerpo de Bomberos de Bogotá y Codensa, empresa responsable de proporcionar la energía eléctrica en la capital colombiana, está trabajando por atender las contingencias presentadas.
Los encharcamientos son el problema más recurrente en la ciudad, y aunque parecen una consecuencia menor de la lluvia, pueden ocasionar riesgos mayores como accidentes de tránsito. Alrededor de las 3:14 p. m. el Cuerpo de Bomberos reportó el rescate de un vehículo que quedó atrapado en un represamiento de agua en la carrera 7 con calle 172. En el sitio no se reportaron personas lesionadas.
Esta temporada de fuertes precipitaciones ya era de esperarse y fue anunciada por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (IDEAM). La entidad indicó en uno de sus boletines de predicción climática que, durante marzo predominará el comportamiento excesivo de lluvias en Bogotá. En abril se espera que los “volúmenes de lluvia sean cercanos a los valores normales de la ciudad”, sin embargo no se descarta que estén un poco por encima de los promedios.
Ante este hecho, el Idiger estableció un plan de reacción inmediata para atender las emergencias que se presenten durante la primera temporada de lluvias en Bogotá. La estrategia fue propuesta en una reunión de la Mesa Distrital para el Manejo de Emergencias y Desastres y se implementó desde inicios de marzo hasta mayo. Con esta se busca reducir las afectaciones en la ciudadanía y sus bienes, el ambiente, la economía y la infraestructura ante la posibilidad de incidentes.
Esta estrategia, que pretende mejorar las acciones de respuestas y la preparación del Sistema Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Sdgrcc), implementará las medidas de monitoreo y definirá los recursos mediante los cuales se efectuará la atención de los eventos que se puedan presentar en la capital.
“Vamos a tener precipitaciones en los próximos días, entregamos un parte de tranquilidad. La alcaldesa Claudia López y la Secretaría de Ambiente están dispuestas a que el fortalecimiento del sistema sea de manera tal que las condiciones que requieran atención de emergencia sean atendidas oportunamente, evitando algún tipo de afectación directa de la población”, aseguró el director de Idiger, Guillermo Escobar, a inicios de mes.
De igual manera, aseguró que los ciudadanos pueden consultar la información mediante el Sistema de Alerta Bogotá (SAB) en el que se registran las lluvias y su intensidad en tiempo real, los sitios propensos de deslizamientos por lluvias, las áreas tendientes a incendios forestales, los niveles de los cauces de la ciudad, los ríos y quebradas propensos a crecientes torrenciales y un monitoreo de las tormentas eléctricas.
Asimismo, el director señaló que, en la ciudad se han dispuesto 15 puntos a través de los cuales se llevará a cabo un monitoreo permanente con el fin de reaccionar inmediatamente ante alguna emergencia ocasionada por las lluvias.
“Hemos identificado 15 puntos a lo largo y ancho de la ciudad donde tenemos equipos del Jardín Botánico, de la Defensa Civil, de la Cruz Roja, de los bomberos, de la Empresa de Acueducto de Bogotá, de las empresas prestadoras de los servicios públicos para la recolección de algún material, de la Unidad de Mantenimiento Vial y todas las entidades de emergencias para que reaccionemos de manera rápida”, indicó Guillermo Escobar.
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