En un trabajo en conjunto con Fiscalía General de la Nación, en la últimas horas, investigadores de la Policía lograron evitar la salida de un tanque, el cual, al momento de un escaneo, evidenció algunas irregularidades en su infraestructura, por lo que tuvieron que verificar el interior del artefacto.
De acuerdo con información suministrada por la Dirección Antinarcóticos, gracias a los constantes controles efectuados, en el puerto de Cartagena, por uniformados de la institución evidenciaron algunas irregularidades en la estructura de un tanque, razón por la cual el inspector designado realizó la revisión física del elemento y en el momento de taladrar el área perfilada por el analista de imágenes, detectó una sustancia pulverulenta de color blanco con olor penetrante característico a una sustancia estupefaciente, la cual fue sometida a la Prueba de Identificación Preliminar Homologada (PIPH), confirmando positivo para clorhidrato cocaína.
En el informe entregado por las autoridades, se indica que personal de la institución tuvo que utilizar herramientas especiales para desintegrar el tanque y cortar las láminas donde los narcotraficantes ocultaron la sustancia, hallando en los compartimentos 712 paquetes rectangulares del alcaloide.
Este elemento utilizado en la industria petrolera, iba a ser enviado en un contenedor hacia México, por lo que este resultado representa una afectación a las estructuras dedicadas al tráfico de drogas ilícitas en un valor cercano a los 12 millones de dólares.
El director de la Policía Antinarcóticos, el general Herman Alejandro Bustamante, se refirió a la incautación, en la cual lo llamativo fue el sistema de camuflaje utilizado, ya le la droga estaba escondida en un tanque “denominado separador trifásico de crudo que es utilizado por las empresas petroleras”, señaló el alto mando al puntualizar que los uniformados se tardaron tres días en desarmarlo.
En lo corrido del año la Dirección Antinarcóticos presenta la incautación de drogas ilícitas en los Puertos del País, llevando un récord de más de 19 toneladas de clorhidrato de cocaína y seguirá efectuando actividades investigativas y operativas que permitan contrarrestar el delito de narcotráfico bajo la premisa “Comprometidos con la vida”.
Jóvenes ‘trepadores’ o ‘micos’, la nueva y peligrosa modalidad para exportar droga desde aguas colombianas
El narcotráfico en América Latina se ha caracterizado por el uso de métodos ingeniosos para traficar de forma ilegal cocaína, como submarinos caseros, usar personas para que trafiquen la droga en aeropuertos, hacer catapultas entre otros. Según una investigación de la Armada Nacional y la Fiscalía General de Colombia, se ha encontrado una nueva forma de tráfico de estupefacientes, que consiste en que jóvenes entre los 16 los 24 años de zonas playeras, que sean buenos nadando y de familias de escasos recursos, carguen con cocaína embarcaciones que se encuentran en movimiento en altamar.
El 29 de enero de 2021, la Fiscalía General de la Nación y la Armada Nacional capturaron a 13 presuntos integrantes de una organización criminal señalada de sacar cocaína entre la carga, contenedores o buques que salían de las terminales marítimas del Caribe, a través de ‘micos’.
Entre los capturados están alias ‘Hermanita’ u ‘Osvaldo’, presunto cabecilla y señalado de ser enlace con el Clan del Golfo en Bolívar. Además, son señalados de ser financiadores del andamiaje criminal, coordinadores logísticos, los encargados de acopiar el estupefaciente en fincas cercanas a las zonas portuarias y empleados de empresas de transporte marítimo, entre otros.
A esta modalidad le han dado el nombre de ‘micos’ o ‘trepadores’ porque, luego de alcanzar la embarcación, los jóvenes deben escalar por una soga unos 15 metros hasta llegar a la superficie del barco.
Debido a que anualmente se calcula que en Colombia se incautan en promedio 1.275 toneladas, ahora los traficantes prefieren esperar a que los conteiner pasen todos los controles en el muelle, para después de 15 minutos, cuando la embarcación haya salido, puedan meter el producto sin riesgo de perder mercancía.
Estos jóvenes son ubicados por redes criminales pertenecientes u aliadas del Clan del Golfo en manglares de Cartagena, Santa Marta y Turbo, donde se encuentran tres de los principales puertos del país.
Esta nueva modalidad de tráfico de drogas detectada por las autoridades usualmente busca contaminar con coca los contenedores que van a destinos europeos como España, Bélgica y Países Bajos.
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