Capturan en Cúcuta a costarricense pedido en extradición por Corte de Estados Unidos

Según fuentes de inteligencia, se logró establecer que este narcotraficante haría parte de una organización que introducía grandes cantidades de cocaína en los Estados Unidos.

Guardar

Este 9 de marzo, fue capturado el ciudadano costarricense Rolando Vindas Abarcas, en zona urbana de San José de Cúcuta, quien tenía circular roja por el Distrito Este de Texas, de los Estados Unidos, por el delito de narcotráfico.

La captura se logró gracias a labores de registro y control de la Policía Nacional, quien descubrió que era requerido por los delitos de “asociación Ilícita para Fabricación y Distribución de Cocaína con el propósito de introducir la droga a los Estados Unidos”.

De acuerdo con Noticias CM&, los uniformados establecieron que el narcotráficante hace parte de una gran organización dedicada a introducir grandes cantidades de cocaína a Estados Unidos, Ecuador, Panamá, Costa Rica, Honduras, México y Guatemala.

Además, tendría vínculos con el ‘Clan del Golfo’ y ‘Cartel de Sinaloa’ en México, que se dedicaban a enviar la droga conseguida por Vindas Abarcas a varios países con embarcaciones sumergibles o lanchas rápidas.

El director de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, mayor general Carlos Ernesto Rodríguez Cortés, dijo que “estos importantes resultados se dan gracias al trabajo articulado como los controles migratorios que se realizan en estas zonas fronterizas, debilitando de manera frontal las acciones transnacionales en la lucha contra el narcotráfico hacia el continente americano”.

En el Norte de Santander operan grupos armados ilegales que están en medio de una disputa territorial por el control de los cultivos de plantaciones de coca.

De acuerdo con el informe anual de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, hasta 2019 esta región del país tenía unas 40 mil hectáreas sembradas de coca, un número que pudo haber aumentado considerablemente en 2020.

Colombia lanza Comando Contra el Narcotráfico y Amenazas Trasnacionales

Colombia activó, el viernes 26 de febrero, el Comando Contra el Narcotráfico y Amenazas Transnacionales (CONAT), una unidad del Ejército que tendrá la misión de combatir los cultivos de hoja de coca, la producción de cocaína, la minería ilegal y los grupos armados ilegales que se financian de esas actividades criminales.

“Nace con el propósito de doblegar, de golpear y de someter las estructuras del narcotráfico y las amenazas transnacionales ligadas a la explotación ilegal de minerales, al tráfico de especies, de personas y por su puesto a cualquier forma transnacional de terrorismo”, dijo el presidente Iván Duque, en el fuerte militar de Tolemaida, en el centro del país.

El lanzamiento del CONAT se hace en momentos en que Colombia, considerado el primer productor mundial de cocaína, se prepara para reactivar, posiblemente a finales de marzo, la fumigación de cultivos de hoja de coca desde aviones con el herbicida glifosato, una vez reciba la autorización ambiental y cumpla los requisitos exigidos por la Corte Constitucional.

La nueva unidad militar, conformada por 7.000 efectivos, se desplegará a zonas selváticas y montañosas en donde la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, las disidencias de las FARC que se apartaron de un acuerdo de paz de 2016 y bandas criminales como el Clan del Golfo realizan actividades de narcotráfico y minería ilícita.

El ministro de Defensa, Diego Molano, aseguró que el comando coordinará la destrucción de cultivos ilícitos en regiones como El Catatumbo, en la frontera con Venezuela, así como en los departamentos de Cauca y Putumayo.

El país suspendió en 2015 la fumigación área, acogiendo una recomendación de la Organización Mundial de la Salud, que considera el herbicida como potencialmente cancerígeno y nocivo para la salud y el medio ambiente.

Colombia, que enfrenta una permanente presión de Estados Unidos para combatir el narcotráfico, terminó 2019 con 154.000 hectáreas de hoja de coca y una producción potencial de cocaína de 1.137 toneladas métricas, de acuerdo con la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito. Aún no hay cifras disponibles del 2020.

El Gobierno y las Fuerzas Armadas aseguran que el narcotráfico es el combustible que alimenta el conflicto interno de más de medio siglo que ha dejado más de 260.000 muertos y millones de desplazados.

Así mismo, acusan a los grupos armados que obtienen millonarios recursos del narcotráfico y la extracción ilícita de minerales de los asesinatos de líderes sociales y las masacres de civiles que se incrementaron durante 2020, según estadísticas de las Naciones Unidas.

Las Fuerzas Armadas erradicaron el año pasado 130.000 hectáreas de hoja de coca y confiscaron alrededor de 500 toneladas de cocaína, los mejores resultados de la historia de Colombia en la lucha contra el narcotráfico.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar