A través de las redes sociales circularon, en las últimas horas, videos un concierto de música popular que se llevó a cabo el pasado fin de semana en Duitama, Boyacá. El evento, al que asistieron más de 100 personas, muchos sin acatar las medidas de bioseguridad causó indignación entre la población, que tacha a los asistentes de irresponsables por la aglomeración masiva en plena emergencia sanitaria, causada por la pandemia de coronavirus. El gerente del establecimiento, habló con La W, y explicó que los organizadores del evento se habían aprovechado de su buena fe, pues le dijeron que los asistentes serían mucho menos de los que realmente fueron.
Además de los videos, en Twitter circuló la foto de las boletas que, supuestamente, habían adquirido los asistentes al concierto, denominado El Ranchenato del año, que, según se lee, tendría como invitados a cantantes como Diana Rivera, Elder Dayan, Rolando Ochoa, Los Inquietos del Vallenato, Aniel Velásquez, Andrey Riobueno, Breiner Gaster, Alejandro ‘el Criollo’ e, incluso, según se lee en la boleta, el reconocido intérprete de música popular Yeison Jiménez, como uno de los cantantes principales.
La alcaldesa de Duitama, Constanza Ramírez Acevedo, aseguró, luego de tener conocimiento del evento clandestino, que tomaría acciones legales en contra de los responsables, que serían sancionados por “poner en riesgo la salud de los habitantes de la ciudad y sobrepasar las medidas, tanto del orden nacional como municipal”.
El ‘Gran Ranchenato Show de caballo parqueado’ como se llamó el evento, se llevó a cabo el pasado 27 de febrero en la central de abastos de la zona y, según informaron medios locales, habría tenido permiso para su realización por parte del gerente de la Sociedad de Economía Mixta de la Central de Abastos, Guillermo Vergara, sin embargo, en las últimas horas, el hombre, aseguró, en un diálogo con La W, que se habían aprovechado de su buena fe pues, había decidido firmar el contrato, con los realizadores del evento, teniendo en cuenta las condiciones que le habían prometido previo al concierto.
De acuerdo con el relato de Vergara, le habían planteado una reunión de no más de 50 personas, y que cumplirían con todos los protocolos de bioseguridad necesarios para combatir contagios masivos de covid-19.
“Ya al momento del evento se da con otro objeto, eminentemente lucrativo y es cuando las autoridades, tanto la Alcaldía como la policía toman funciones como tal”, dijo Vergara quien, además, entregó toda la información que tenía en sus manos, a las autoridades.
El concejal municipal, Ómar James, en testimonios recopilados por RCN Radio, aseguró que “con todo el aprecio que le tengo a la Secretaria de Gobierno, y consciente de que venía haciendo un excelente trabajo, tengo que decir que por dignidad y responsabilidad debe presentar su carta de renuncia (..) ya que esto no tiene justificación, al igual que el Comandante de la Policía y el Gerente de Centro Abastos”.
El concierto, que según aseguraron las autoridades tenía precios de entrada de entre tres y cinco millones de pesos por palco de cinco personas, y de 500 mil pesos por entrada individual, no contaba con permisos de la administración municipal, de acuerdo con lo explicado por Constanza Ramírez Acevedo quien, además aseguró, en una entrevista con Caracol Radio, que, “el gerente de la central de abastos tiene una responsabilidad grande, y eso lo tendrá que definirlo la Fiscalía (...) nos iremos con toda la fuerza de la ley, con la Policía se está adelantando las investigaciones y tenemos muchas pruebas”.
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