Exembajador Sanclemente niega las acusaciones del mayordomo: “No tienen cómo demostrar absolutamente nada”

Laureano Martínez, el empleado de la propiedad, quien decidió “decir la verdad porque la Fiscalía le habría ofrecido garantías”, aseguró que el exdiplomático sabía de todo lo que pasaba en su propiedad y que sin su autorización “no se hacía nada”.

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El exembajador de Colombia en
El exembajador de Colombia en Uruguay Fernando Sanclemente. EFE/Raúl Martínez/Archivo

El 12 de febrero del 2020, la Fiscalía y la Policía encontraron tres laboratorios para el procesamiento de cocaína en una finca denominada Haras de San Fernando, en Guasca (Cundinamarca).

La finca, en la que se encontraron siete toneladas de insumos químicos y 9.453 gramos de cocaína y pasta de coca, pertenecía al entonces embajador de Colombia en Uruguay, Fernando Sanclemente. Lo que lo llevó a renunciar de su cargo, sin embargo, aseguró que ni él, ni su familia conocían que en su propiedad se estuvieran desarrollando actividades ilícitas. “Las pruebas no me involucran y acreditan mi inocencia”, dijo en su momento.

El fin de semana del 28 de febrero, salieron algunos denuncias que presentó el mayordomo Laureano Martínez contra Sanclemente, acusando al exembajador de haber sabido todo lo ocurrido en el predio, donde en un cambio de versión de los hechos, decidió “decir la verdad, porque la fiscalía le habría ofrecido garantías” según señaló Eduardo Muñoz, abogado defensor en una entrevista para El Tiempo.

Martínez sostuvo que Sanclemente sabía de todo lo que pasaba en su propiedad e incluso dijo que sin su autorización “no se hacía nada”, que “fue el que dio la orden” y que alguna vez incluso estuvo en el lugar supervisando lo que se hacía.

Al hablar de pruebas el hombre cuenta que el exembajador quemó un computador que contenía el material que lo involucraría, pero también habla de un celular en el que habría audios y mensajes que lo comprometen. Y que en ese material Sanclemente se refiere a los narcóticos como cultivos de papa.

Pocos días después Fernando Sanclemente, sostiene que tales señalamientos son “pura infamia” y que “no tienen cómo demostrar absolutamente nada” en la W.

Además, mencionó que “Ningún empleador advirtió estas actividades. Cualquier persona que nos hubiese alterado, nosotros hubiésemos advertido a las autoridades” agregó que “Rechazo categóricamente las afirmaciones sobre que recibí dinero en efectivo. Estoy completamente dolido. Llevo un año en esta viacrucis. No he recibido dinero alguno de ninguna actividad irregular. No tenemos conocimientos que existía el laboratorio”.

En entrevista con la Revista Semana sobre la investigación señaló que “Yo estoy atento a que la administración de justicia y los organismos de inteligencia cuanto antes esclarezcan esta situación en aras de limpiar mi buen nombre y el de mi familia y yo no soy quien para estar husmeando quiénes son los dueños de ese laboratorio que tanto daño nos han hecho en lo personal, patrimonial y reputacional”.

Por su parte su abogado, Iván Cancino, aseguró que detrás de lo encontrado en la finca, existen personas muy peligrosas y que no solo paso en el predio de la familia Sanclemente, sino que en la zona parece que existen más fincas con este tipo de laboratorios.

“La información que hemos podido corroborar y mirar desde la defensa es que era una costumbre de algunas personas de la zona entre Cundinamarca y Boyacá que tienen vínculos, al parecer también con estos negocios del narcotráfico, que usaban unas fincas con conocimiento de los propietarios para hacer microcultivos, y otras fincas sin conocimiento de los propietarios para hacer también esos minilaboratorios”, aseguró Cancino a la revista.

En cuando a Martínez, el ex embajador comentó que no llegó a tener con él “un sí, ni un no”, y que llevaba trabajando para su empresa de ganadería alrededor de tres años. “Yo lo entrevisté incluso con el veterinario que me asiste desde el año 2008, el doctor Mauricio González, y las consideraciones por las cuales fue vinculado fueron porque era un experto particularmente en inseminación”.

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