Una mansión, una camioneta, y negocios en Ibagué, darían cuenta de la culpabilidad de Andrés Sanmiguel en Odebrecht

Un apartamento en Brickell, el distrito financiero de la ciudad de Miami, en Estados Unidos, sería una nueva pista para avanzar con las investigaciones del escándalo de corrupción de Odebrecht que, en sí mismo, involucra a varios funcionarios colombianos. La lujosa mansión, de acuerdo con una de las últimas investigaciones del periódico El Tiempo, habría recibido como cuota inicial para su adquisición, un dinero de Andrés Sanmiguel, socio de Gistic Soluciones Integrales, una firma que, según denunciaron previamente Álvaro Uribe y Andrés Pastrana, había recibido $4.017 millones de la Concesionaria de la Ruta del Sol (Consol).

En una audiencia pública en Bogotá, el exsenador Bernardo Miguel Elías, conocido como ‘El Ñoño Elías’, revivió acusaciones que, de nuevo, revuelven el ambiente de los presuntos involucrados colombianos dentro del multimillonario desfalco. Bajo la advertencia de temer por su vida, ‘Ñoño’ lanzó fuertes declaraciones en el juicio que se extendió durante tres días respecto al desarrollo de la investigación sobre el exdirector de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, procesado por el caso Odebrecht.

“En estos tres días de esta semana he narrado unos hechos que tocan a mucha gente, por eso yo quiero decirle a usted, yo no me quiero suicidar y dejó constancia al país, ni quiero morirme, yo quiero vivir”, alertó.

Una de sus más graves denuncias fue la de el dinero que, se presume, habría sido direccionado para las elecciones presidenciales de Colombia, en 2014, que llevaron a Juan Manuel Santos a ser el mandatario del país. De acuerdo con su testimonio, Eleuberto Martorelli, exdirectivo de la multinacional, le dijo que se había reunido directamente con el expresidente Juan Manuel Santos, su exgerente de campaña Roberto Prieto y otros miembros de su equipo para garantizarle su respaldo en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de ese año.

Martorelli, por su parte, declaró que nunca hizo aportes a la campaña de reelección de Santos e, incluso, la defensa del expresidente salió a desmentir la supuesta reunión.

De acuerdo con la información divulgada por El Tiempo, la Fiscalía tiene en sus manos información que permitiría encontrar bienes e inversiones que se habían hecho con dineros originarios de la famosa polémica de corrupción, como la mansión de Miami que, supuestamente, habría comprado Sanmiguel.

Además de la costosa vivienda, relató el periódico nacional, Sanmiguel habría invertido parte de su dinero en una cooperativa en Ibagué, y habría comprado una camioneta de alta gama para su esposa, Edna Karina Méndez.

En una entrevista otorgada por Iván Cancino, abogado defensor de Sanmiguel, en exclusiva, para el diario colombiano, el jurista declaró que la compra de la costosa casa, la camioneta, y su inversión en la cooperativa, no había sido producto de dineros ilegales, que su defendido habría hecho estas compras con dinero producto de otras fuente financieras, “Sanmiguel es un hombre muy rico. Bienvenida la investigación de esos bienes. Nada de esa plata se invirtió en eso. Todo fue con créditos”.

Sanmiguel, y su esposa Edna Karina, de quien aseguran que fue involucrada en el caso injustamente luego de la falsificación de su firma en documentos de la investigación, serán imputados, el próximo lunes 1 de marzo, por lavado de activos y enriquecimiento ilícito. El mismo destino tendrán David Fernando Portilla, Esteban Moreno y Ricardo Rey.

El ente acusado continúa la investigación sobre 12 personas más dentro del escándalo que, para el momento, incluye a Roberto Prieto, gerente de la campaña de Santos, Luis Fernando Andrade, el expresidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), y a demás empresarios señalados por los expresidentes Álvaro Uribe y Andrés Pastrana, desde 2017. Algunos de la lista de los 12 serán imputados, según reveló El Tiempo, por los cargos en las obras del Interconector Tunjuelo-Canoas, el tramo Ocaña-Gamarra, el puente vehicular entre Plato y Zambrano, y otros contratos ficticios.

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