El informe Los peces olvidados del mundo realizado por 16 organizaciones de conservación a nivel mundial, entre ellas la ONG WWF, detalla la extraordinaria variedad de especies de peces de agua dulce que hay actualmente, pues los últimos descubrimientos revelan que en total hay 18.075, lo que representa más de la mitad de todas las especies de peces del mundo y una cuarta parte de todas las especies de vertebrados de la Tierra.
“Esta riqueza es esencial para la salud de los ríos, lagos y otros humedales del mundo y aporta a las sociedades y economías de todo el mundo”, destacó en RCN Radio Saulo Usma, especialista en Agua Dulce de WWF Colombia.
La deslumbrante diversidad de peces de agua dulce del mundo es fundamental para la salud, la seguridad alimentaria y los medios de vida de cientos de millones de personas, pero estas especies están cada vez más amenazadas, al punto que uno de cada tres peces de agua dulce ya está en peligro de extinción, según un informe publicado este viernes por las organizaciones conservacionistas mundiales, entre ellas la WWF.
<b>Panorama nacional</b>
Aunque según la WWF, el país cuenta con una gran diversidad de peces de agua dulce: 1.595, según las estimaciones más recientes (392 son endémicas y 106 son migratorias), aspectos como el uso de artes de pesca ilegales, la sobrepesca y la contaminación por mercurio que genera la minería ilegal, generan un riesgo en especies como bagres del género Brachyplatystoma.
La organización informó que, es urgente que “se redoblen los esfuerzos para aprovechar la biodiversidad de nuestras especies, hacer un uso sostenible de ellas y mejorar así la calidad de vida de las comunidades locales”.
La ONG resaltó cuatro puntos importantes para tener en cuenta sobre los peces de agua dulce en el país:
-Pese a la enorme riqueza que el país tiene en peces de agua dulce, de las 1.595 especies que hay identificadas, solo el 29 % se comercializan: 106 para consumo y 351 ornamentales.
-”El país debe fortalecer la planificación del uso sostenible y la comercialización justa de sus especies ornamentales de agua dulce. En 2015, las divisas generadas por la exportación de éstas ascendieron a los ocho millones de dólares y en 2019, más del 50 % de los ejemplares exportados (4.851.668) provenían de Inírida”, señaló la WWF Colombia.
Según la organización, el comercio de pescado podría mejorar la vida de las comunidades si el mercado nacional comprara especies nativas y no especies exóticas como las tradicionales bailarinas y guramis.
-De la Orinoquia (Puerto Carreño e Inírida) sale el 90 % de la pesquería de peces ornamentales de agua dulce del país, pero sus ríos enfrentan cada vez mayores amenazas.
-La cuenca del río Bita reconocido por ser uno de los ríos más conservados del país, es un corredor ecológico importante y el epicentro de la pesca deportiva nacional. Sin embargo, según la ONG está siendo afectada por la pesca ilegal de especies en peligro.
Saulo Usma, especialista en Agua Dulce de WWF Colombia, dijo en RCN Radio que el panorama en el país es triste por el riesgo y la extinción de algunas especies. “En Colombia tenemos 52 especies con alguna categoría de amenaza para desaparecer del planeta. Tenemos el triste honor de haber extinguido el pez graso del lago de Tota (Boyacá) y de tener a la especie de bagre rayado del Magdalena en peligro crítico de extinción”, afirmó.
Igualmente, señaló que cada vez es más preocupante la deforestación, la sobrepesca y la construcción de hidroeléctricas en el país, ya que estas constituyen las principales causas de la extinción de las especies de peces de agua dulce.