El pasado 10 de febrero, la representante a la Cámara por Bogotá de la Alianza Verde, Juanita Goebertus, comentó una publicación en las redes sociales de la revista Semana tildando de falsa una noticia sobre los supuestos acercamientos de su partido con el senador Gustavo Petro, de cara a las elecciones presidenciales de 2022.
La publicación, titulada “Alianza Verde autoriza diálogos exploratorios con Gustavo Petro y el Polo”, habla acerca del anuncio que hizo el también representante Verde Inti Asprilla con respecto a diálogos que él, junto a Antonio Navarro Wolff y Carlos Ramón González, sostendrían con la Colombia Humana.
“Esta noticia es falsa”, aseveró Goebertus, a través de su cuenta oficial de Twitter, contradiciendo a su copartidario. Ante esto, Asprilla salió en defensa de Semana y del anuncio que él mismo hizo. “La noticia es cierta, tan cierta como las charlas que tu sector sostiene con Fajardo, Galán, De la Calle y otros”, trinó.
Al día siguiente, Jonathan Bock, director ejecutivo de la Fundación para la Libertad de Prensa, se pronunció ante la aseveración de la congresista. La FLIP calificó de “preocupante” el trino de Goebertus, ya que señaló a un medio de comunicación de difundir información falsa “sin exponer pruebas, cuando el hecho noticioso había sido difundido en distintos medios de comunicación”, explicó el documento.
“Categorizar esta información como ‘noticia falsa’ sin aportar ningún tipo de información adicional, cuando fue confirmada por voceros del Partido Verde, es un señalamiento grave e infundado que se aparta de su rol en la promoción de un debate público y constructivo”, señaló la misiva, la cual también recalcó que, por su actividad legislativa y sus más de 114.000 seguidores, es más grave el mensaje que envía.
“En su lugar, por su reconocimiento político y exposición pública, su mensaje tiene el potencial de afectar la credibilidad del medio de comunicación mencionado”, reza el parte de la organización, el cual resalta la responsabilidad que tiene la aforada de garantizar las libertades civiles y debe utilizar mecanismos constitucionales para tramitar el desacuerdo con Semana.
Es decir, Goebertus y, de ese modo, nadie, puede controvertir una noticia por medio de redes sociales sin ventilar el hecho con el medio; debido a que en redes esta es susceptible de multiplicarse.
“Después de su publicación hubo varios comentarios que, de manera inmediata, atacaron al medio de comunicación, su credibilidad y su ética periodística, lo que inevitablemente termina generando un ambiente de agresividad y de autocensura para las decenas de periodistas que trabajan en revista Semana y todos aquellos que también reportaron la noticia”, indicó Bock, quien, además, resaltó la labor de la congresista, y de la bancada de la Alianza Verde en el Congreso, en pujas por la libertad de expresión. Finalizando la carta, la organización dijo que “corresponde” rectificar la afirmación.
Ante esto, Goebertus hizo lo que la FLIP le indicó. Por medio de su cuenta de Twitter, el mismo medio por el que la congresista aseveró que la noticia era falsa, rectificó sus palabras y habló sobre su conversación con la fundación.
“He hablado con la FLIP y reconozco que mi trino rotulando una noticia como falsa, sin dar más detalles, puede afectar la libertad de prensa. Me equivoqué. No voy a violar confidencialidad de la reunión del Partido Verde. El tiempo mostrará lo que realmente se acordó ayer”, dejando, aún rectificado, en entredicho el anuncio del congresista Asprilla, quien pertenece a otra ala de los Verdes.
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