ONU visita Norte de Santander y se encienden alertas por fuerte presencia del Clan del Golfo

El pasado 9 de febrero se conoció que, en zona rural de Cúcuta, capital de Norte de Santander, se capturó a Luis Alberto Guisao Borja, presunto segundo cabecilla del despliegue del Clan del Golfo en la zona fronteriza. De acuerdo con las autoridades, alias ‘Samuel’ o ‘Urabá' era el supuesto encargado de extorsionar, secuestrar y adelantar las negociaciones de narcotráfico en esta zona.

De acuerdo con el diario La Opinión, las las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) o Clan del Golfo es el nuevo jugador en el juego de entramados criminales en la zona del departamento. Según El Espectador, dicho despliegue fue alertado por sectores cercanos a las comunidades del departamento de Norte de Santander en diciembre de 2020 y, entre las zonas más preocupantes, está Banco de Arena, vecina del Catatumbo.

De acuerdo con la versión de finales de 2020 de la Defensoría del Pueblo, las veredas de San Miguel y El Empalme, pertenecientes a la turbulenta zona y vecinas de Banco de Arena, estarían en riesgo por la disputa del poder territorial entre el ELN y Los Rastrojos.

“La frontera de Tibú hacia las poblaciones venezolanas está parcialmente controlada por el ELN mediante la instalación de minas antipersonales en las veredas La Primavera y El Socorro para impedir el paso de los Rastrojos. Sin embargo, esta es una frontera muy extensa y los Rastrojos se han movido por territorio del vecino país, lo que plantea la posibilidad de ingresar a Tibú desde la parte más noroccidental de la frontera a través de áreas de La Casigua y El Cubo, por donde también transitaba el EPL”, explicó la autoridad, según reporta el diario capitalino.

Por esto, la representante en Colombia de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Juliette de Rivero, visitó el territorio para constatar las denuncias que había recibido acerca del estado de la comunidad.

Tal como reporta el diario capitalino, los campesinos del área estarían pagando extorsiones a hombres de Daniel Antonio Úsuga, alias ‘Otoniel’, quien es el jefe máximo de la estructura criminal. De acuerdo con las autoridades, la organización buscaría la consolidación en Cúcuta para fines de narcotráfico en zonas cercanas a la frontera con Venezuela.

De acuerdo con Wilfredo Cañizales, director de la veeduría local llamada Fundación Progresar, otros abusos que sufren los locales son restricciones al transporte de alimentos y estarían siendo obligados a desplazarse.

“Esta vereda queda apenas a 40 minutos de Cúcuta y es una zona en la que hay distritos de riego. No es una región donde no haya inversión social y abandonado a su suerte”, explicó el vocero de la institución al diario impreso.

No solo trascienden las amenazas, sino que ya se están comenzando a presentar los desplazamientos en el territorio. Un miembro de la comunidad, quien le pidió a El Espectador mantenerse anónimo, explicó el proceso de retiro de habitantes. “Vamos saliendo de a poco, pero hay mucho temor. Cuando llegaron esta gente armada dijeron que venían a sacar al Eln y a sus colaboradores”, expresó. El sujeto también explicó que su familia sale poco a poco por el temor de que en cualquier momento “enciendan a tiros” a él o a sus allegados.

Capturan a extorsionistas de ‘Los Pelusos’ en Cúcuta

En horas de la mañana de este miércoles 10 de febrero, uniformados de la brigada 30 del Ejército Nacional, en coordinación con la Dirección de Investigación Criminal (Dijín) de la Policía de Norte de Santander y la Fiscalía, capturaron en flagrancia a siete presuntos miembros de la banda criminal ‘Los Pelusos’.

“Fueron capturados siete sujetos armados que venían cometiendo delitos en zona rural de Cúcuta y Tibú, originando zozobra e intranquilidad en la población”, informó a RCN Radio, el secretario de Gobierno de Norte de Santander, Felipe Corzo. Las zonas, que anteriormente se mencionaron en disputa, tendrían otro jugador ilegal en busca de poder.

De acuerdo con las autoridades, el procedimiento de captura se registró cerca al área urbana de Cúcuta, donde, tras días de seguimiento, lograron la detención de seis hombres y una mujer. Los delincuentes se encontraban en la zona coordinando reuniones con personas dedicadas al narcotráfico para saldar cobros de extorsiones y buscar ayuda económica para financiar la organización.

Los capturados son señalados de los delitos de extorsión, secuestros, homicidios selectivos, tráfico y control de estupefacientes en la zona fronteriza, además de la difusión de panfletos alusivos al Ejército Popular de Liberación (EPL), y la entrega de material bélico para fortalecer su componente armado y retomar su disputa territorial con el grupo armado organizado del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

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