Así será el regreso a clases presenciales en Bogotá

Luego de que, según la Alcaldía de Bogotá, la capital habría pasado el segundo pico de contagios por COVID-19 se informó a la ciudadanía que el regreso a las clases sería de manera presencial con el modelo de alternancia, es decir, que será un periodo mixto en el que se mezcla la virtualidad con la presencialidad y, además, dentro de esta última solo podrá haber un aforo del 35%, teniendo como base un caso hipotético de una institución de 1.000 estudiantes.

Estas medidas establecidas por la mandataria capitalina generó que diferentes sectores e instituciones de la ciudad comentaran su posición y opinión frente al tema y así empezó el desacuerdo entre estos entes. Dentro de este pleito está la Alcaldía de Bogotá, el ministerio de Salud y Educación, Fecode, la Asociación Distrital de Educadores y la secretaría de Educación y Salud de Bogotá. Entre estos se discute si se debería o no volver a la presencialidad.

Debemos recordar que ningún estudiante está obligado a quedarse en casa o a ir a las instituciones educativas, así que, al fin y al cabo, los padres serán los encargados de tomar la decisión frente a sus hijos. Y que, además, uno de los puntos importantes de la presencialidad es, según la UNICEF, la salud mental y emocional y el desarrollo social y personal de los niños.

El principal desacuerdo fue entre el distrito y el ministerio de Educación ya que este último comentó que se debería tener en cuenta la opinión del Comité Epidemiológico Nacional que, en este caso, no aprobaron las medidas impuestas por la alcaldesa Claudia López. Sin embargo, el Gobierno no ha trazado límites esperando que más estudiantes puedan acceder a las clases en alternancia.

Luego de este revuelo, el ministro de Salud, Fernando Ruíz Gómez, aclaró que su ministerio está de acuerdo con el regreso a las aulas de manera presencial. “El planteamiento que hace la Resolución 1721 de 2020 de este ministerio es que el único limitante que debe haber es el distanciamiento de un metro dentro de las áreas cerradas y de dos metros en los espacios abiertos, eso da un aforo bastante mayor al que han anunciado algunas alcaldías”.

La mandataria de Bogotá fue clara diciendo que los lineamientos ya establecidos no deben ser de importancia para el Comité Epidemiológico Nacional, luego de que el ministerio de Salud dijera que se debía tener en cuenta a este comité, sino que esto debe ser de importancia para el ministerio y secretaría de Educación. López recalcó que se seguirá con el modelo que se viene utilizando desde el año pasado.

Por medio de su cuenta de Twitter, la alcaldesa de Bogotá dijo que: “Siguiendo los protocolos de @Mineducacion y @Educacionbogota estamos demarcando y habilitando los colegios públicos que recibirán a los niños, niñas y jóvenes, cuyos padres decidan voluntariamente, enviar a presencialidad gradual, progresiva y segura a partir del 15 de febrero”. Enfatizó que: “Los protocolos de bioseguridad del sector educativo son competencia de @Mineducacion y @Educacionbogota y no del Comité epidemiológico de @MinSaludCol. Cumpliendo los protocolos y medidas de bioseguridad los colegios privados podrán reiniciar el 8 de febrero y los públicos el 15″.

“No debe haber dilaciones y otras restricciones adicionales al distanciamiento y lavado de manos en el retorno a las clases, necesitamos que se vuelvan a recuperar las oportunidades de crecimiento físico e intelectual para los niños”, agregó el ministro de Salud.

Ayer, 3 de febrero, la secretaria de Educación de Bogotá, Edna Bonilla, estuvo en una entrevista para el diario El Tiempo en el que dio cifras y explicó los lineamientos con los que se retornará el regreso a las aulas. “Hasta el momento hay 915 instituciones habilitadas para volver a la presencialidad. No hay ningún colegio que no esté haciendo nada. De esas 915 instituciones 123 son colegios públicos, 588 jardines y centros educativos privados, 70 instituciones de educación superior, 11 de educación para el trabajo y 16 centros Sena, los cuales ya cumplen con todas las medidas de bioseguridad aprobadas por el distrito”.

Los colegios privados tiene la flexibilidad de crear de manera autónoma su esquema de reorganización escolar, siempre y cuando los niños sean mayores de dos años, los trabajadores, ya sean docentes o administrativos, tenga entre 18 y 59 años, y no se superen una jornada de cuatro horas, así como deberán tener dentro de la institución un comité de contingencia que gestione las medidas según las condiciones epidemiológicas del entorno.

Por el lado de los colegios públicos, el distrito destinó un dinero para la compra de 1,5 millones de tapabocas, que se entregarán junto con elementos de bioseguridad a los estudiantes. De acuerdo con la secretaria de Educación, el regreso será por bloques. “No se trata de una fecha, sino de un período. Creemos que esta reapertura que se inició el año pasado va a tardar dos años para que se entiendan los costos, pero también los aprendizajes de la pandemia. Nada es más retador que el regreso. Queremos mitigar el impacto de la pandemia en la salud emocional, en el aprendizaje, en el goce del encuentro y en la seguridad de los niños, niñas y maestros”, agregó Edna Bonilla.

Desde Fecode, Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación, han dicho que no es que no les interese el regreso a las aulas, sino que esperan que haya bioseguridad para todos, ya que los docentes son grupo vulnerable para el contagio.

María Camila Ocampo, integrante de la Asociación Nacional Estudiantes de Secundaria comentó que: “no es que no queremos la alternancia, sino que no hay condiciones de salubridad y garantías de bioseguridad en los colegios, así como de infraestructura, porque en un salón de tres o cuatro metros cuadrados en el que están acostumbrados a metro 40 chicos y un profesor es absurdo respetar distanciamiento o que haya algo de normas de bioseguridad. Los colegios no cuentan con ello y el estado tampoco nos lo está garantizando, lo que busca es que los estudiantes y docentes nos coloquemos también de carne de cañón en esta pandemia“.

Otro de los implicados en esta discusión es la Asociación Distrital de Educadores que, desde que se empezó a hablar de los planes pilotos, ha sido tajante y ha expresado que regresará solo hasta que se den todas las condiciones. “Es una irresponsabilidad el llamado de la alcaldesa. Hemos venido dando discusiones con la Secretaría y la comunidad científica ha planteado que hasta que baje el nivel de contagios y muertes no es posible el regreso. Aquí han tratado de mostrar que ha bajado el número de UCI, pero no es por eso que se debe decidir, sino que se debe analizar el número de pruebas hechas por el Ministerio y la Secretaría de Salud”, dijo William Agudelo, director de la asociación, según información de El Espectador.

Además, Agudelo comentó que sumado a esto, en varios de los 120 colegios aprobados para el regreso a las aulas, ni los consejos directivos ni los maestros han decidido el participar a este retorno, “por lo tanto somos claros en plantear que primero deben sacar la declaración de cada uno de los colegios de cómo se tomó la decisión desde el gobierno escolar, y segundo, sacar videos de las condiciones de las instituciones como están, porque vamos a solicitar a la Personería Distrital para que esté al tanto de la situación”, agregó Agudelo.

Por parte de los padres de familia, Carlos ballesteros, presidente Confenalpadres, se dijo que: “las condiciones no están dadas para siquiera pensar en la alternancia y muchísimo menos en la prespecialidad. La ministra, según su propia voz, nombró un grupo de expertos, pero seguramente están en Dinamarca y no en Cundinamarca y eso es un problema porque no se entiende realmente lo que quiere hacer con la educación”.

Ante este panorama, estudiantes, docentes, administrativos y padres de familia le están pidiendo al gobierno que se apropie de la realidad de las escuelas y la educación pública en el país, al tiempo que le exigen que garantice y fortalezca los procesos académicos desde casa con equipos tecnológicos y acceso a internet para que los más de 8 millones de estudiantes oficiales puedan continuar educándose.

El distrito advirtió que está revisando los lineamientos y que continuarán en conversaciones con los maestros del sector público. De acuerdo con esto solo queda esperar en cómo se logrará trabajar en conjunto entre las diferentes opiniones del gobierno nacional y las instituciones locales, y, además, estar pendientes a los diálogos que haya con los maestros.