El Banco de la República de Colombia anunció, este 29 de enero, que por cuarta vez consecutiva, el país mantendrá las tasas de interés de referencia en el 1,75 por ciento que se viene trabajando desde el año pasado. La decisión fue anunciada luego de la primera sesión de la junta directiva de la entidad, a cargo del nuevo gerente, Leonardo Villar.
Según un comunicado de la entidad, la medida se toma luego de una votación de cinco a favor y dos en contra, teniendo en cuenta seis factores, siendo el más importante el hecho de que “la inflación para el año 2020 fue de 1,6 por ciento, por debajo de la meta del 3,0 por ciento fijada por la junta directiva del Banco de la República”, a lo que se suma que el promedio de los indicadores de la inflación básica se ubicó en 1,3 por ciento.
De igual manera, la alta cúpula del emisor anotó que las expectativas de inflación continúan estables y son de 2,7 por ciento para fin de 2021, con una trayectoria de de niveles bajos durante el primer trimestre del año y una importante aceleración posterior durante el resto del mismo, lo que a su vez lleva a prever que dicho indicador se ubicará por el orden del 3,1 por ciento para fin de 2022.
Por otra parte, y contrario a las preocupaciones que han demostrado en los últimos días entidades como Fenalco, la Anif y Fedesarrollo, señalaron que “los indicadores de crecimiento económico más recientes confirman la recuperación de la actividad y se espera que esta evolución continúe a lo largo del año”. Con esto, aseguran que el sistema financiero continúa presentando condiciones favorables y estables de solvencia y liquidez. “En ese contexto la cartera de crédito y las tasas de interés siguen respondiendo a los estímulos de política monetaria”, dicen.
Además, reconocieron que si bien persiste la incertidumbre asociada con los efectos económicos de los rebrotes de la pandemia, vistos sobre todo durante la segunda y tercera semana de enero, cuando se intensificaron las medidas restrictivas en las principales ciudades del país, “las condiciones financieras externas se mantienen favorables para la financiación de la economía colombiana”.
Tras dar su informe, el recién posesionado gerente también se refirió a lo sucedido en el país a nivel de pandemia durante enero. “En la discusión, por su puesto el tema del rebrote de la pandemia en las semanas pasadas se tuvo en cuenta. Es una consideración importante, pero hay mucha incertidumbre sobre el impacto hacia adelante que pueda tener ese rebrote sobre la economía, en la medida en que parece estar ya controlándose; y también el impacto que pueda tener el proceso de vacunación que debe empezar relativamente pronto”.
Dicho de otra forma, la valoración de dichos factores si tuvo peso en la decisión de mantener la tasa de interés. No obstante, reconoció, la incertidumbre acarreada por las mismas obliga a que los equipos técnicos del emisor tengan que mantenerse alerta a cómo evolucionan para poder tenerlas en cuenta en futuras determinaciones.
Por otra parte, Villar destacó que “hay un consenso en la junta, en mantener una tasa de interés que ayude a la recuperación económica, que a juicio de todos está en niveles expansivos, que otorgan condiciones favorables para una recuperación económica”.
En ese sentido, explicó que la decisión no fue unánime por diferencias marginales que surgen de consideraciones sobre los riesgos asociados a mantener la tasa de interés o bajarla ligeramente durante este mes. No obstante, se trataría de detalles sencillos que pierden peso frente a “las consideraciones generales de mantener una política expansiva y de ayudar a la economía, que son de consenso general”, aseguró.
Por último, comentó que la perspectiva para este año es de recuperación y refleja la política adoptadas por la entidad desde el inicio de la pandemia. Sin embargo, precisó que el próximo miércoles se conocerán más detalles de las mismas, teniendo en cuenta todo lo sucedido en enero.
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