El anuncio realizado por la Gobernación del Departamento advierte que la medida de restricción de movilidad es necesaria para frenar el incremento de propagación del COVID-19.
Las restricciones funcionarán en horario nocturno, desde el 22 de enero hasta el 1 de febrero en la totalidad de Boyacá.
De acuerdo con las explicaciones brindadas por las autoridades, la decisión fue tomada con la aprobación del Ministerio del Interior y en consenso con los alcaldes del departamento, ante el acelerado incremento de ocupación de UCI en el sistema hospitalario del centro del país.
Lea más: En 15 zonas de Bogotá tendrán cortes este viernes 22 de enero
El gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán Adame señaló que las medidas restrictivas impactarán a los 123 municipios del departamento. Además, habrá un confinamiento total para los 39 municipios que tienen índices altos de contagios durante este fin de semana.
Sin embargo, no adelantó si este confinamiento continuará en el siguiente fin de semana.
Con estas medidas, el departamento se suma a Antioquia y Norte de Santander, así como Bogotá, en restringir movilidades durante las noches para prevenir el colapso de su sistema hospitalario.
Reacciones a las medidas
El gremio de restaurantes y hostelería advirtió que se encuentra en “alerta roja” por las medidas restrictivas impuestas por la Gobernación del departamento.
Camilo Corredor, vocero, solicitó a los gobiernos locales y Nacional, que presten atención a los empresarios en momentos de crisis sanitaria y económica.
Para Caracol Radio, seccional Boyacá, subrayó que el panorama para los comerciantes en Tunja, la capital del departamento, no es el más adecuado para sus negocios: “Realmente nosotros en Tunja somos 870 establecimientos, que empleamos de manera directa a 3.900 personas, y de manera indirecta, cerca de 12.000. En este momento presentamos alrededor del 28% de los restaurantes y la situación es muy crítica para los que quedamos”.
Afirmó que su gremio, junto a otros del sector industria y comercio, ha tributado 70 mil millones de pesos en cinco años, por lo que demanda atención por parte de las autoridades para evitar una crisis aún más grande para la economía del departamento.
De acuerdo con el reporte diario del Ministerio de Salud, Boyacá presentó un nuevo récord con 19 personas muertas en un día por COVID-19; en estos momentos, el departamento reporta 552 casos nuevos de personas contagiadas.
Boyacá llegó a los 37.848 casos registrados desde el inicio de la pandemia en Colombia, en marzo de 2020.
El gobernador Barragán Adame había pedido a los alcaldes del departamento mantener al pendiente de las cifras e intensificar las medidas a nivel municipal, con el fin de evitar llegar a decretar medidas aún más fuertes, como las anunciadas en las últimas horas.
“El virus no se ha ido. Al contrario, la situación cada día está más complicada, por eso insistimos en que la única herramienta efectiva es la disciplina social. Ni las medidas restrictivas, ni el aumento de camas UCI serán suficientes si seguimos con la indisciplina, con aglomeraciones, con fiestas, con actividades sociales que han permitido el aumento desbordado de casos covid en el departamento de Boyacá. Cuidemos nuestra vida y de aquellos a los que más queremos”, afirmó en las primeras semanas de enero, cuando su departamento aún no había escalado en la crisis que afronta por ocupación de camas UCI.