Ante el resurgimiento de las amenazas que recibieron los líderes sociales y pobladores de El Salado, Bolívar, se estableció en la zona un consejo de seguridad entre la alcaldía de El Carmen De Bolívar, la Gobernación y las Fuerzas Militares y de Policía, con el fin de establecer las acciones que impidan hechos de violencia contra la comunidad.
Como resultado de dichas deliberaciones, se ofreció una recompensa de hasta $20 millones para quien suministre información de los autores del panfleto que atemoriza a la población desde el pasado lunes.
En el Consejo de Seguridad, en el que tuvo participación la Alta Consejera para Derechos Humanos, Nancy Patricia Gutiérrez, mandos de la Fuerza Pública, así como el Alto Consejero para la Estabilización, y representantes de la Unidad de Restitución de Tierras, informaron a la comunidad que los acompañaban con presencia del estado e hicieron un llamado a la calma y la tranquilidad.
En el mismo sentido, se pronunció el Gobernador Vicente Blel “No vamos a permitir que en el departamento se presenten este tipo de situaciones que alteran la tranquilidad, sobre todo en una subregión donde no se pueden presentar situaciones que afecten a las víctimas”, afirmó el funcionario en rueda de prensa ante medios regionales.
Entre los resultados inmediatos del Consejo, se instaló de manera permanente un puesto mando situacional que será coordinado por la Policía y la Armada Nacional, con el fin de garantizar la presencia de la Fuerza Pública en el corregimiento así como garantizar la tranquilidad en el corregimiento.
Además, uno de los compromisos priorizados en el Consejo fue la visita de una delegación compuesta por Ministerio de Agricultura, la Unidad de Restitución de Tierras, la Agencia Nacional de Tierras y la Alta Consejería para la Estabilización el próximo 28 de enero.
¿Cómo fue la masacre de El Salado?
El Salado es un corregimiento de Carmen de Bolívar, ubicado aproximadamente a 18 kilómetros de la cabecera municipal, hace parte de la región de los Montes de María y cuenta con una población cercana a los 5000 habitantes urbanos y un poco más en veredas.
En la época de los 2000 buscaban un crecimiento económico que les permitiera ser catalogados como un municipio y así poder recibir más inversión pública.
En febrero del 2000 la historia de El Salado cambió para siempre, el 16 de ese mes un amplio grupo de paramilitares del Bloque Norte de las denominadas Autodefensas Unidas de Colombia, conformado aproximadamente por más de 700 hombres, todos armados, bajo las ordenes de Jhon Jairo Esquivel (alias el Tigre), Jaime Delgado alias “el Gallo”, Rodrigo Alfonso Mercado Peluffo alias “Cadena”, y Uber Enrique Bánquez Martínez alias “Juancho Dique”, se concentraron en la Finca Las Palmas ubicada en el municipio de San Onofre y desde allí partieron en camiones hacia el corregimiento.
Los paramilitares ingresaron a los caseríos de Palmarito, Pativaca, El Recreo, Puerto Príncipe, Bajo Grande y el Cielito, todos ubicados en Sucre. Los más de 450 paramilitares que estaban a cargo de Jhon Jairo Esquivel Cuadrado alias “el Tigre”, entraron a las malas a todas las viviendas pateando las puertas y obligando a los pobladores a salir y dirigirse hacia el parque principal, acompañando sus acciones con una serie de insultos y gritos en los que se les acusaban de ser guerrilleros.
Los saldos de la tragedia fueron un total de 63 víctimas asesinadas, 23 víctimas desaparecidas hasta el día de hoy y un aproximado de 4000 habitantes desplazados forzadamente hacia otras regiones del país.