En horas de la mañana del día de ayer, 11 de enero, asesinaron a Giovani Claro en medio de un fuego cruzado entre un supuesto grupo de extorsionistas y un presunto grupo armado organizado activo en la subregión del Catatumbo. En lo que lleva del año ya se han asesinado a cuatro excombatientes de la antigua guerrilla de las FARC, y Claro ya es el número 253 desde la firma de los acuerdos de La Habana, según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz..
Giovani Claro, conocido como Gerson Piñeros en su época militante, quien, desde que dejó las armas, se encontraba en el Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación Negro Eliécer Gaitán, en Caño Indio, jurisdicción del municipio de Tibú cumpliendo sus labores de reincorporación.
El suceso se conoció gracias a información preliminar que emitieron desde la región. También se supo que Giovani Claro se encontraba con otras personas, también civiles, en medio de un fuego cruzado y un proyectil le impactó. El exguerrillero falleció cuando era trasladado a un centro asistencial del municipio de Convención.
La senadora del partido de las FARC, Victoria Sandino, por medio de su cuenta de Twitter comentó: “Hoy en Tibú, Norte de Santander asesinaron al cuarto firmante de paz en 11 días que van de 2021. Giovani Claro o Gerson Piñeros hacía su proceso de reincorporación en el ETCR El Negro Eliécer Gatitán. Avanza el genocidio contra firmantes de la Paz”.
Según el diario El Espectador, a pesar de que Claro no fue asesinado en Tibú, como afirmó la senadora, su acreditación como reincorporado, desde el 5 de junio de 2019, y sus años de militante los vivió en esa zona del Catatumbo.
La sección encargada del posconflicto de El Espectador, Colombia 2020, habló con Las autoridades locales, y de acuerdo con voceros del partido de las FARC, se encuentran investigando si este hecho fue premeditado para asesinar a Claro, por su condición de excombatiente, o si se trata de un crimen en el que él no era el que quitarle la vida al reincorporado no era objetivo de los asesinos.
Por otro lado, Rubén Zamora, promotor de Derechos Humanos del partido FARC en Norte de Santander contó que: “El enfrentamiento se dio en medio de la población civil, uno de los proyectiles dio en el cuerpo de Giovany Claro García, persona en proceso de reincorporación a la vida civil y mientras lo trasladaban al hospital de Convención, la víctima falleció”, desde el partido rechazan los hechos y denuncian un plan de exterminio en su contra.
Por el abandono estatal, Claro todavía no contaba con un proyecto productivo, por lo que de la mano de su familia trataban de salir adelante por medio de labores agrícolas. Los demás excombatientes y miembros de este partido han denunciado constantemente que el Gobierno Nacional no ha ofrecido las garantías para la implementación del Acuerdos de Paz y mucho menos para la seguridad de las personas en proceso de reincorporación.
“Ocurre en un contexto de profundización de la violencia en los territorios, de estigmatización, criminalización y un genocidio contra el partido FARC, contra los excombatientes, lo cual parece que se trata de un plan sistemático” finalizó Rubén Zamora.