Alias “Messi” habría sido representante de varios futbolistas de la segunda división del fútbol colombiano

DIJIN descubrió que, aparte del lujo y el coleccionismo, el narco invisible fue una figura destacada del fútbol juvenil. Movió a algunos talentos en las ligas argentina y mejicana, además de ser amigo de exjugadores destacados del país.

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Al parecer, alias "Messi" dentro de sus actividades de fachada gestionó jugadores de segunda división del Urabá antioqueño.
Al parecer, alias "Messi" dentro de sus actividades de fachada gestionó jugadores de segunda división del Urabá antioqueño.

Además de manejar las rutas del narcotráfico que dejaron otros capos, que fueron dados de baja o capturados por las Fuerzas Militares en el cerco que vienen realizando para dar con el paradero de alias “Otoniel”, John Freddy Zapata, el narco invisible que operaba negocios fachada para la estructura criminal del Clan del Golfo, se habría ganado a pulso el alias de “Messi” por el que hoy lo conoce Colombia como representante y manejador de futbolistas en el Urabá Antioqueño.

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Lo anterior se desprende de una investigación publicada por El ESPECTADOR, que rastrea el modus operandi del “respetado empresario” en lo tocante al fútbol de segunda división en dicha zona geográfica, conocida por aportar jugadores de calidad tanto al mercado interno como al externo.

Manejador de talentos con un pasado oscuro

Al parecer, la trayectoria de Zapata era reconocida en el ambiente del fútbol, ya que contaba a su haber con la venta de pases de algunos juveniles a las poderosas ligas de México y Argentina, además de contar con amistades estrechas con exjugadores, cuyas conexiones facilitaron su ingreso a las familias de aquellos que representó directamente.

Según declaraciones del nuevo director de la DIJIN, General Fernando Murillo, para EL ESPECTADOR, las familias de éstos desconocían que alias “Messi” lavara dinero en las transacciones de los jugadores que representaba ni tampoco quién en realidad era: “Las familias de los muchachos no sabían en realidad quién era alias Messi ni que a través de la venta de los jugadores se estaba lavando plata”. Su nivel de efectividad en negociaciones deportivas le granjearon un nombre que le fue útil para ganar notoriedad en semilleros juveniles del país: “Él se mueve bien en las segundas divisiones del fútbol profesional. Ya incursionó en Bogotá, Cali y Medellín. Los nombres de los equipos todavía no se pueden conocer, porque es una línea de investigación que todavía está en marcha”, agregó el general Murillo en declaraciones para este medio.

Sin embargo, la labor de alias “Messi” no solo fue la de mediador, sino que también fungió de representante, lo que le dio margen para lavar recursos de las Autodefensas Gaitanistas durante la negociación de los derechos deportivos de sus representados: “Por ejemplo, compran el pase de un jugador por $300 millones, pero dentro del sistema de transacción aparece que la compra fue por $150 millones. Zapata se mete en la mitad de la relación de los jugadores con los clubes y ahí también, en sus contratos por representatividad, mete dinero de las Agc”, declaró el oficial en lo que se asemeja a un movimiento utilizado por las mafias de Los Balcanes con jóvenes talentos de esa parte del mundo, por lo que es más ágil trabajar con semilleros que con clubes de primera: “Aunque también hay venta de jugadores a equipos de primera división, son más apetecidas las ligas de segunda división porque no están en el radar”, indicó el General Murillo a EL ESPECTADOR.

Fútbol y narcotráfico: una historia refrendada por la lista Clinton

En las últimas décadas la relación turbia entre el balompié y los carteles ha copado titulares de prensa e investigaciones oficiales.

La lista Clinton, en la que estuvo el club deportivo América de Cali y Envigado Fútbol Club, implicó años de aislamiento comercial para ambos equipos.

Mientras el primero tuvo que cambiar sus estructuras organizativas y financieras para salir de esta lista, el segundo tuvo qué esperar un fallo del Departamento de Estado, en 2018, para regresar a la normalidad financiera. Pese a esto, el Envigado fue vinculado a actividades de lavado de dinero con el grupo criminal conocido como La Oficina de Envigado, lo que significó un daño enorme a su credibilidad al interior de la Dimayor.

En el caso de “Messi”, la DIJIN no encontró nexos de éste con dicho grupo criminal, pese a que se sabe de alianzas entre las Autodefensas Gaitanistas y esta estructura criminal para la gestión de rutas y envíos en el norte de Colombia.

Mientras alias “Messi”, o John Freddy Zapata aguarda condena, las autoridades reportaron que por concepto de actividades criminales llegó a recaudar anualmente, $190 mil millones.

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