En una entrevista para la revista Vea, la actriz Danna García, nacida en Medellín, explicó cómo ha sido su vida después de haber sufrido de coronavirus durante varias semanas. Su memoria, por ejemplo, fue una de las habilidades físicas que más se vieron afectadas y, hoy en día, es su esposo quien le ayuda a estar consciente y a recordar cosas que olvida como consecuencia de la covid-19.
La actriz paisa se contagió mientras se encontraba en España a principios de año. Aunque suele ser una enfermedad que, en muchas ocasiones, desaparece en un promedio de tiempo de 14 o 15 días, Danna, en mayo de 2020, anunció que, por tercera vez consecutiva, desde marzo, su resultado de la infección de coronavirus daba positivo. “Casi no me suelta”, le dijo Danna a la periodista María Elvira Arango, en una entrevista para Noticias Caracol.
García, quien protagonizó la popular telenovela ‘Pasión de Gavilanes’ con su personaje de Norma Elizondo, explicó que su esposo ha sido su fiel ayudante en su proceso de recuperación, “se te va la memoria. Mi marido me hace tareas, me dice, ‘apréndete, todos los días, unos versos de un poema, y luego yo te los pregunto’. Me ha servido mucho, porque para grabar necesito buena memoria”.
Así mismo, Danna explicó que además de sus problemas de memoria, ha sufrido de vértigo, situación que la ha puesto en peligro y que la incomoda constantemente. “Me caí con mi niño alzado, me fui de cara. Estás sentado en la silla y sientes que la vas a atravesar. Me duró mucho tiempo”, manifestó la protagonista de la novela ‘Bella Calamidades’ a Vea.
Además de estas secuelas, de la caída del cabello y de la resequedad extrema en su cuerpo, la salud de Danna se vio gravemente afectada desde antes de sufrir coronavirus: los pulmones de la actriz ya estaban comprometidos tras haber sufrido de dengue dos o tres meses antes de presentar los primeros síntomas de covid-19, según los cálculos de la actriz.
Todo esto, por supuesto, como explicó Danna en Noticias Caracol, sin contar con las afectaciones que le implicó el virus a su salud mental y a sus emociones. Danna tuvo que alejarse de su pequeño hijo, Dante, hasta cerciorarse de que el virus ya no estaba activo en su cuerpo, esa situación fue muy compleja para ella.
“A pesar de que el virus dura activo en el cuerpo un tiempo, en mi caso fue un tiempo excepcional, no sé porqué (...) Las secuelas del virus son cosas que uno carga, no sabemos por cuanto tiempo, y yo creo que la parte emocional es una parte muy importante para quienes hemos estado enfermos, o para familias que tienen personas en esas condiciones (...) estar alejado fue todavía más duro”.
Aunque Danna aseguró que trataba de ser prudente al hablar de sus síntomas, porque no quería confundir a las personas que la veían, la actriz explicó que las secuelas han sido complicadas y que, incluso a septiembre, cuando ya habían pasado meses del diagnóstico que la declaraba como libre de coronavirus, ella seguía luchando para superar las consecuencias.
En su entrevista con María Elvira Arango, Danna resaltó que se encontraba positiva y feliz de ir saliendo de su padecimiento con el virus, y que ella prefiere ver el virus como un mensaje que llama a la humanidad a ver las cosas de manera diferente, a poner otras prioridades sobre la mesa y a valorar el entorno que rodea a cada ser humano.