El hermano del exdirector de la Policía, Rodolfo Palomino, aceptó los cargos

Ramón Eduardo Palomino, quien fue capturado en San Gil, Santander, el pasado 20 de diciembre, por ser el articulador una red denominada ‘Los Oportunistas’, aceptó los cargos de concierto para delinquir, fraude procesal, obtención de documento público falso, estafa agravada, hurto calificado y agravado, y usurpación de inmuebles.

De acuerdo con la investigación de las autoridades, en las detenciones también se capturó a dos hombres que trabajaban con Ramón Palomino, quienes en este momento son presentados en audiencias de control de garantías para su imputación y judicialización.

Por medio de un comunicado, la Fiscalía informó que se logró constatar que un grupo, en cabeza de Ramón Eduardo Palomino, presuntamente estafó a propietarios de viviendas o lotes desocupados, o inmuebles que pertenecían a personas con problemas económicos. Los señalados integrantes de esta organización, al parecer, con engaños lograron documentos públicos falsos, como escrituras, y así procedían a vender a terceras personas los bienes que no les pertenecían.

Así delinquía la banda ’Los oportunistas’

Durante su actuar delictivo, logró radicar escrituras falsas en una Oficina de Instrumentos Públicos y también titular viviendas a otra personas que harían parte de la organización delincuencial. Asimismo, la Fiscalía detalló que el primer evento delictivo que logró acreditar ocurrió en 2011, cuando aprovechó su vínculo familiar con el entonces director de la Policía Metropolitana de Bogotá Rodolfo Palomino y convenció a una mujer para que le otorgara un poder, y así levantar una hipoteca que pesaba sobre una casa y así hacer la realización de documentos públicos falsos.

En otros actos, la Fiscalía indicó en el comunicado de la existencia de un lote aledaño a la casa vinculada al primer caso que, al parecer, también fue vendido irregularmente por 135 millones de pesos en 2012, a un señalado integrante de la organización ilícita.

Otro hecho estaría relacionado con la apropiación ilegal de una vivienda en Bogotá, cuyos legítimos dueños se trasladaron a Huila mientras pasaba el periodo de aislamiento preventivo obligatorio por el Covid-19. Ramón Eduardo Palomino López presuntamente violentó las cerraduras de las puertas del inmueble e hizo ocupación física del mismo. Posteriormente, sacó los muebles y enseres, con base en un documento que, supuestamente, lo acreditaba como propietario desde 2015.

No es la primera vez que el hombre de 67 años es vinculado a un proceso judicial, según expedientes judiciales del hermano del exdirector de la Policía y el comandante en la capital de Norte de Santander, a quienes no se ha relacionado con el proceso, evidencian que estuvo detenido del 2004 al 2008, por hechos relacionados con la Ley 30 de 1886, por la cual se adopta el Estatuto Nacional de Estupefacientes. Recobró su libertad luego de que el Juzgado Sexto de Ejecución de Penas de Bogotá se la concediera.

Otro de los procesos en los que estuvo vinculado Palomino, distinto al que se hoy día se lleva a cabo, fue por el delito de estafa, inicialmente llevado a cabo en Santander y, luego, trasladado a Bogotá.

Pese a que se ejecutó en Santander, la captura de Ramón Palomino estuvo bajo la responsabilidad de agentes de la Sijín de la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog), una vez que la Fiscalía 79 de la Unidad de Patrimonio y Fe Pública hizo la solicitud de detención ante un juez.

Por su parte, el general en retiro Rodolfo Palomino, se pronunció, por medio de un comunicado, ante la polémica captura de su hermano y afirmó que, “Si bien es cierto que no existe el delito de sangre, vale decir que estas sindicaciones nos producen un profundo dolor e indignación, especialmente por las eventuales víctimas”.

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