‘Cartas abiertas’, el proyecto de escritura para que los reclusos colombianos se repongan de casi un año sin visitas

Para muchos la Navidad es una época de reuniones, encuentros y detalles. Para estar con amigos y familiares, celebrar en pareja, cocinar y disfrutar de los alimentos. Estas son acciones cotidianas propias de diciembre y aunque algunos estemos acostumbrados a ello, hay cientos de personas que en vez de pasar las fiestas en casa, se encuentran recluidas en un centro carcelario.

Los privados de la libertad han sido uno de los sectores sociales más afectados por el aislamiento que trajo consigo la pandemia del coronavirus, pues además de revelarse un hacinamiento que en marzo sobrepasaba el 54,9%, según estadísticas del Inpec, los reclusos dejaron de recibir las tradicionales visitas semanales de sus familiares.

Teniendo en cuenta este contexto, surgió la idea de ‘Cartas Abiertas’, un proyecto para promover la escritura de cartas entre los privados de la libertad, como un ejercicio de resiliencia para aliviar los efectos negativos a nivel psicosocial de los reclusos.

“Siempre ha sido importante la comunicación y por eso la búsqueda de otras estrategias. La habitual restricción de los dispositivos de comunicación nos ha llevado a redescubrir la escritura de cartas, es decir a la ‘antigüita’”, afirmó Angela Mesa, coordinadora de la Biblioteca de la Cárcel Distrital, y quien implementará la idea junto con la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de Puente Aranda,

El proyecto ‘Cartas Abiertas’ hace parte de un proceso de extensión bibliotecaria de BibloRed al que ya se inscribieron 227 privados de la libertad, para hacer parte de diferentes talleres de escritura que se dictarán entre diciembre y enero.

“Pasamos celda por celda para preguntar quién quería participar en este proceso. Los interesados debían hacer una prueba: tomaban un pequeño relato de Jairo Aníbal Niño, lo leían y debían escribir una reflexión. Además, debían escribir por qué deseaban asistir al taller”, contó Heidy Gil, Mediadora de Lectura, Escritura y Oralidad.

De la mano de BibloRed y la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia, se les brindará a los reclusos las herramientas necesarias para que mediante la escritura encuentren una forma de transmitir sus sentimientos, compartir sus vivencias y acercarse a sus seres queridos.

Inicialmente, los reclusos pondrán en práctica los aprendizajes recibidos en estas semanas escribiendo cartas de Navidad a sus familiares. “En estos momentos no hay visitas en ningún centro penitenciario pero las familias pueden llevar encomiendas. En ese espacio queremos hacer la entrega de las cartas navideñas”, explicó Gil.

Sin embargo, más adelante se busca conectar los testimonios de los privados de la libertad colombianos con otros reclusos en México.

“Un estudiante de una Especialización en Promoción de Lectura de Veracruz, México, nos presentó una propuesta en la que hablaba de una carta como una forma de contacto, ya que a raíz de la pandemia las distancias se han hecho más amplias. Esto nos ha llevado a buscar nuevas formas de comunicación o a reciclar otras que ya estaban en desuso como el de las cartas”, cuenta Ángela.

Se planea que entre enero y febrero del 2021, se realice un intercambio con el Centro de Reinserción Social (CERESO) de Pacho Viejo Zona 1 en Veracruz, México, donde lideran un proyecto similar. La idea es que se den ocho intercambios de cartas entre privados de la libertad de ambos países, para que puedan compartir experiencias y descubrir cómo se siente la reclusión en otras culturas.

“Es importante y mágico rescatar esa posibilidad desde la propia mano. Una oportunidad de volver la mirada a lo más simple. A las cartas escritas a mano, con esfero y papel”, concluyó Angela Mesa.