¿Qué es la boldenona y por qué le ha traído problemas a los deportistas colombianos?

La Federación Internacional de Halterofilia, organización que regula el deporte de levantamiento de pesas, confirmó en las últimas horas una sanción de cuatro años para los pesistas Yenny Sinisterra, Juan Solís y Ana Iris Segura por la presencia de boldenona en su organismo.

La sanción, impuesta provisionalmente desde febrero de este año, fue ratificada el pasado 16 de diciembre por la autoridad internacional del deporte. El mismo día, se recibió la noticia de que Fabián Puerta, ciclista de pista olímpico, fue notificado de la ratificación de su suspensión por boldenona en sus pruebas anti dopaje.

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Colombia no ha tenido una buena racha en los últimos años en términos de dopaje. Si bien el deporte colombiano se ha destacado por sus grandes actuaciones en las diferentes disputas deportivas, también ha sido un camino plagado por los positivos para sustancias prohibidas en los organismos de los atletas.

La situación en el país se ha intensificado tanto que, teniendo un campeón del Tour de France en 2019, ese mismo año Colombia llegó a ser el país con más casos activos de dopaje en la Unión Ciclística Internacional con 19 procesos abiertos. De la cuenta global, el 15% de casos pertenecían a los pedalistas cafeteros.

La disciplina más golpeada por los positivos son las pesas, disciplina que le ha traído al país oro olímpico y varias preseas en el medallero nacional. Desde el 2013, se registraron otros 4 atletas sancionados por la presencia de la misma sustancia: boldenona.

El ciclismo, como anteriormente se mencionó, ha registrado problemas por dopaje que, incluso, terminaron en la desaparición del equipo Manzana Postobón de la escena continental por dopaje de dos corredores. Uno de ellos fue un caso de boldenona.

“El dopaje en el deporte se ha vuelto una enfermedad y hay que decirles a los atletas que no hagan esas prácticas. Nosotros no bajamos los brazos y seguimos en la lucha”, expresó Ernesto Lucena, ministro del Deporte, a El Tiempo el pasado mes de enero.

En las reiteradas acusaciones, se ha destacado la presencia del químico boldenona dentro de los cuerpos de los destacados colombianos. Entre ellos, se encuentran los pesistas Andrés Caicedo y Yeison López, ambos positivos en 2018. Daniel Londoño y Yobani Ricardo, futbolistas del Atlético Huila, también registraron boldenona y fueron sancionados por 4 años por la confirmación, pero meses después fue levantada la medida por la Dimayor.

Santiago Echeverría, exfutbolista de Independiente Medellín, también utilizó la boldenona y fue sancionado preliminarmente por el mismo periodo de tiempo. Además, se registró en los ciclistas Juan José Amador, Sergio Salazar y Alexis Camacho, quienes fueron suspendidos de manera provisional.

En un caso más notable, el tenista colombiano Robert Farah, ganador de grand slam y entonces número uno del mundo, resultó positivo para boldenona en su organismo, según la Federación Internacional de Tenis. El colombiano tuvo que retirarse de la primera gran competición del presente año, Australian Open, por la suspensión provisional que se le impuso.

Sin embargo, el tenista vallecaucano argumentó que la prueba se le hizo durante momentos que se encontraba fuera de competencia y de vacaciones en Colombia, por lo que justificó la sustancia en su cuerpo por el consumo de carne vacuna local.

¿Qué es la boldenona?

Según la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), la boldenona es un agente anabólico amplia y explícitamente prohibido por la institución en todas ocasiones. Esta restricción no se limita a las competencias o a momentos por fuera de las disputas deportivas, ya que la prohibición abarca todo momento en la vida de un atleta activo.

La boldenona es un suplemento que se registra como esteroide anabólico androgénico dentro de las instituciones que controlan el uso de sustancias en el deporte. Utilizada en personas, la sustancia pretende mejorar el desempeño físico, ayudar a aumentar de peso e incrementa masa muscular.

Está muy presente en la carne de vaca, ya que se le suministra al ganado para poder sacar mayor provecho del animal y tener un mejor producto final. La sustancia tiene uso veterinario autorizado en Colombia.

Incluso, por medio de un comunicado del Comité Olímpico Colombiano, expedido en 2018, la institución alerta la presencia de boldenona en el ganado vacuno del país de forma significativa y que el mismo fármaco cuenta con venta libre en el país.

“Se comprueba que en una de cada cuatro muestras de residuos de ganado vacuno, se encuentra dicha sustancia, además que de acuerdo con el ICA, existen 59 productos donde se utiliza boldenona para su uso veterinario en Colombia, lo cual es un número bastante significativo”, aseveró la COC, dejando un precedente que ha funcionado para la defensa de los atletas nacionales.

Este químico, derivado de la testosterona, puede tener impacto negativo en los organismos que lo utilizan. Puede producir brotes de acné, reducción de testículos, alteración en la producción de la hormona masculina, engrosamiento de voz, presión alta e, incluso, problemas hepáticos.

Colombia tendrá tribunal disciplinario antidopaje

La situación de dopaje de los tres pesistas pone en riesgo la participación del país en Halterofilia por el Código Disciplinario Mundial que rige al deporte. Según el mismo, si un país, en determinada disciplina, registra tres casos de dopaje al mismo tiempo, significa que dicha nación no podrá tener representantes por el país disputando las justas.

No siendo los únicos casos de dopaje en el deporte y dada la reiterada problemática, el Senado de la República aprobó dos proyectos de ley en los que penaliza legalmente a los deportistas que se vean implicados en esta práctica ilícita.

Por esto, se creará el Tribunal de Expertos Disciplinarios Antidopaje, instancia inédita en la historia de Colombia, que será el máximo organismo para juzgar los casos de faltas a los reglamentos de sustancias prohibidas nacionales e internacionales. Dicho tribunal estaría conformado por dos profesionales en derecho y un experto médico deportólogo.

Por otro lado, se estableció por medio del proyecto de Ley 327 de 2020 que aquellos que “formulen, suministren, apliquen o administren a un deportista profesional o aficionado alguna sustancia o método prohibido en el deporte, o lo induzca al consumo, incurrirá en prisión de veinticuatro (24) a setenta y dos (72) meses y multa de sesenta y seis (66) a setecientos cincuenta (750) salarios mínimos legales mensuales vigentes”, de manera que los profesionales de la salud y seleccionadores que se involucren en los actos irregulares también tendrán sanciones que terminarían en privación de libertad.

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