La última encuesta de Barranquilla Cómo Vamos, que pretende evaluar la calidad de vida de los habitantes de esta ciudad de la costa colombiana, confirmó que, la cuarentena para las familias barranquilleras, fue una época muy dura, no solo por la incertidumbre frente a la enfermedad del covid-19, sino porque el 33% de todos los ciudadanos se quedó sin ingresos y esto los obligó a pasar hambre.
Aunque el estudio se realizó en toda la región, Barranquilla registró el mayor porcentaje de personas que manifestaron que algún miembro de su hogar pasó hambre por falta de recursos (33%). La localidad Metropolitana registró la mayor afectación (43,5%), seguida del sector de suroccidente (36%) y suroriente (34,7%).
Además, los encuestados aseguraron que el desempleo, la educación y la pobreza son los principales ejes que tiene que trabajar el Gobierno Local para que la población pueda recuperarse de alguna manera de la crisis de los últimos meses.
La directora de Barranquilla Cómo Vamos, Kathy Diartt Pombo, confirmó que ya que se hizo la medición a mediados de octubre, cuando el confinamiento había terminado, los habitantes tenían una actitud mucho más positiva frente a la pandemia y todos los encuestados aseguraron que con la reapertura, se sentían un poco más tranquilos pues tenían maneras de producir.
<mark class="hl_yellow">Más resultados frente a lo que opinan los habitantes de Barranquilla sobre la vida en esta ciudad:</mark>
El 50% de los barranquilleros encuestados consideró que las cosas en la ciudad van por muy buen camino. Este porcentaje aumenta considerablemente en las localidades Riomar (61%) y Norte Centro Histórico (55%).
Con respecto al entorno económico, el 66% de los barranquilleros manifestó que algún miembro de su hogar perdió su empleo por causa de la pandemia. Además, el 51,4% afirmó que los ingresos de su hogar no alcanzan para cubrir los gastos, siendo la localidad metropolitana la más afectada (63%).
Si bien Barranquilla es la ciudad más satisfecha con el servicio de salud en la región (42,2%), la opinión de los encuestados estuvo dividida. Además, se observa un mejoramiento tanto en la salud física como en la salud mental de los encuestados.
En el período de reactivación, Barranquilla se mantuvo como la ciudad con el porcentaje más alto de satisfacción con la educación durante la pandemia a nivel regional. No obstante, mientras la satisfacción se ubicó en 33%, el 49,6% de los encuestados manifiesta sentirse insatisfecho.
En el período de reactivación económica, aumentó levemente la satisfacción de los ciudadanos encuestados con los servicios públicos en la ciudad. Los mejor evaluados siguen siendo acueducto (71% satisfechos) y gas domiciliario (88% satisfechos).
Se observa una disminución en la percepción de seguridad con respecto a los resultados de la primera fase de la encuesta. Mientras que en la Fase 1, el 48% de los encuestados afirmó sentirse seguro en su barrio, en la fase 2 el porcentaje fue 32%. Las localidades Metropolitana y Suroriente registran mayor percepción de inseguridad.
El 65% de los barranquilleros encuestados se sienten insatisfechos con los servicios prestados por las entidades de justicia durante la pandemia y el 72,6% considera que el sistema de justicia es inefectivo para atender y resolver los conflictos de la población.
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