Al menos 100 familias que viven cerca a La Línea se han visto afectadas por el cierre de la vía

De acuerdo con el Invías, el corredor entre Calarcá y Cajamarca estará cerrado al menos por dos meses más.

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En el corredor vial solo
En el corredor vial solo esta permitido el tránsito de vehículos de carga y de transporte público entre las 6:00 de la mañana y las 2:00 de la tarde. Foto: Invías.

Desde hace unos días, el Instituto Nacional de Vías (Invias) restringió el paso vehicular por la vía La Línea, en el corredor vial entre Calarcá (Quindío) y Cajamarca (Tolima) debido al riesgo por deslizamientos, y además para intervenir y estabilizar el talud Bellavista en el kilómetro 38+900. Desde entonces, por lo menos 100 familias que viven en la vereda Cristales de Cajamarca, en Tolima, han tenido dificultades para abastecerse y buscar asistencia médica, así lo informó el periódico El Tiempo.

No podemos ir a mercar a Cajamarca, al ser de Tolima nuestros servicios de salud y educación están en Cajamarca, pero ahora estamos afectados porque no podemos movilizarnos porque tendríamos que bajar al Quindío, volver a subir hasta el túnel y pasar al pueblo. En el momento es imposible hacerlo no solo por el trancón, sino porque no se permite el paso de carros particulares.”, le explicó Yulieth Edith Mora, habitante de la vereda, al medio.

Según las medidas decretadas por el Invías, en este corredor vial solo esta permitido el tránsito de vehículos de carga y de transporte público entre las 6:00 de la mañana y las 2:00 de la tarde.

Como la comunidad vive a unos 800 metros sobre el túnel de la Línea, al no poder desplazarse en vehículos particulares, y cómo los servicios públicos llegan sin cupo, les es imposible llegara hasta Cajamarca, así lo informó el periódico El Tiempo.

“El trancón de camiones no nos deja pasar a Cajamarca. Podemos bajar a Calarcá, pero no podríamos subir de nuevo porque no nos dejan pasar. No tenemos derecho ni a enfermarnos.”, manifestó Mora al mismo medio.

La habitante de la vereda Cristales de Cajamarca, así mismo le expresó a El Tiempo que las autoridades les ofrecen como vía alterna ir hasta el Alto de las Letras, sin embargo, los campesinos de la zona consideran que es no es una medida viable. “Como si los campesinos no tuviéramos necesidades ni comiéramos ni nada”, le dijo Mora al medio.

Los gremios del turismo en Quindío, así mismo, manifestaron su preocupación frente al cierre de la vía pues señalan que generará pérdidas en el sector, ya que muchos conductores que se movilizan desde Cundinamarca al Eje Cafetero no consideran el Alto de las Letras como una opción vehicular viable.

“Si la gente viene por el Alto de las Letras hay más peajes, así que pedimos que bajen esas tarifas para que la gente pueda venir. Teníamos más del 70 por ciento en reservas, pueden demorarse más viajando, pero les pedimos que no cancelen sus viajes”, le expresó a El Tiempo la presidente del Comité Intergremial del Quindío, Diana López.

Así le verificó al medio Adolfo Cifuentes, un conductor que estaba en el Eje Cafetero y tuvo que tomar la vía del Alto de las Letras, donde de acuerdo con él, tuvo que pagar nueve peajes, mientras que en la Línea solo pagaba cinco o seis, además de que le tomó más tiempo llegar a su destino y tuvo que incrementar el gasto en gasolina.

El alcalde de Armenia, José Manuel Ríos, por su parte le solicitó al presidente Duque permitir el tránsito de vehículos particulares por la Línea los fines de semana, para así evitar la afectación del turismo en la región cafetera, además de disminuir el valor de los peajes de la vía alterna por Manizales.

Una de las alternativas que le propuse al presidente fueron que las personas que tuvieran acreditadas una reserva y que se quedaran en nuestra región, al tomar la vía alterna, tuvieran una disminución o exoneración en sus peajes, e incluso que nos dieran cierto plazo o espacio para en los puentes festivos puedan transitar los vehículos particulares”, explicó Ríos a Caracol Radio.

De acuerdo con el Invías, la vía seguirá cerrada al menos por dos meses más, pues aunque continúan las labores de remoción, hasta el momento solo han sido retirados 3.700 cúbicos de material de los 72.000 metros cúbicos que deben remover.

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