Desde la noche del pasado 5 de diciembre, el senador de la república Feliciano Valencia denunció una masacre en el municipio de Santander de Quilichao, al igual que Jorge Eliécer Sánchez, uno de los líderes del Concejo Regional Indígena del Cauca (CRIC); ambos hablaban de entre cuatro y seis víctimas. Pues bien, las autoridades dieron a conocer que la masacre se perpetró producto de un enfrentamiento de la comunidad y dos sicarios.
El crimen se perpetró en un establecimiento comercial del municipio, en horas de la noche: el par de asesinos entró para disparar de manera contra una de las víctimas, razón por la cual los testigos de lo ocurrido se enfrentaron a los pistoleros, de acuerdo con Mauricio Capaz, de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (Acin).
Dos de los atacados por los victimarios fallecieron en el lugar de los hechos, mientras que otros dos murieron en un hospital; es decir, fueron cuatro las víctimas.
A falta de esclarecer el porqué de lo ocurrido, el secretario de Gobierno de Cauca, Luis Angulo, dio a conocer su preocupación por el recrudecimiento de la violencia en el suroccidente del país: “Lamentable la situación que viene desangrando al departamento del Cauca. Como Gobernación seguiremos atendiéndola como hasta el momento hemos hecho y apoyar a las familias víctimas, acompañarlas en esta situación lamentable”
Las denuncias de Feliciano Valencia y miembros del CRIC
Según Feliciano Valencia, senador de la república y exconsejero del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), en el municipio de Santander de Quilichao se perpetró una masacre la noche de sábado, que, a la madrugada de este domingo, había dejado un saldo de cuatro indígenas asesinados. Así lo confirmó en su cuenta en Twitter.
Sobre el crimen denunciado por el senador, Jorge Eliecer Sánchez, uno de los líderes del CRIC, denunció que fueron seis los indígenas masacrados, de los cuales tres eran comuneros del resguardo Munchique los Tigres de dicho municipio. “No es posible que nuestros planes de vida cada día estén en riesgo y la guerra los quiera quebrantar”, señaló.
Una de las víctimas del acto de violencia fue Carlos Escue, quien se desempeñó como coordinador local de jóvenes del Resguardo Munchique y, antes de su asesinato, hacía parte del grupo musical Intentos de Amor. Aún se conoce las identidades de los demás fallecidos.
La masacre en Santander de Quilichao fue reportada horas después de que se hubiera dado a conocer el asesinato del Eduardo Julicue, de 31 años, en Caloto; era el hijo de la exconsejera de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte de Cauca (ACIN), Luz Eida Julicue.
El sábado 5 de diciembre también se denunció el asesinato de Guildon Solís Ambuila, “líder social de la comunidad de Munchique en el municipio Buenos Aires, Cauca. En los últimos días estaba acompañando a las víctimas de las dos masacres que se dieron en este municipio durante este año”, de acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).
Juan Carlos Petins, reconocido comunero indígena del resguardo Nega Cxhab - Belalcázar del municipio de Páez, Cauca, fue uno más de los asesinados el sábado que recién pasó; dos días después de que el Alto Comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, hiciera presencia en este municipio.
Según Indepaz, Petins se dedicaba a ofrecer sus servicios de soporte para el uso de redes de comunicaciones e Internet. Su asesinato fue reportado a eso de las 11 de la mañana por los pobladores del resguardo indígena de Tálaga.
Por el momento, se está a la espera del reporte oficial de lo sucedido en Santander de Quilichao, así como el esclarecimiento de los asesinatos de Eduardo Julicue, Guildon Solís Ambuila y Juan Carlos Petins.
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