Durante operaciones de control territorial efectuadas en el área rural del departamento del Guaviare, tropas de la Vigésima Segunda Brigada de Selva, pertenecientes a la Cuarta División del Ejército Nacional, ubicó un sumergible con material de guerra perteneciente al grupo armado organizado residual de la Estructura Primera de las disidencias de las Farc-EP. Según el Ejército, los soldados recorrían la zona para realizar labores de erradicación, pero recibieron información por parte del personal de inteligencia que los alertó sobre la presencia del sumergible metálico de 20 metros de largo.
El artefacto contenía 570 minas antipersona, 160 detonadores eléctricos, 2 canecas de 20 galones cada una con ACPM (Aceite Combustible Para Motores), 1 cilindro de 40 libras, 5 galones de alcohol y 1 detector de metales.
El Grupo de Explosivos y Demoliciones (EXDE) y el Grupo Operativo Especial de Investigación Criminal (GROIC) activaron los protocolos de seguridad para neutralizar y destruir, de manera controlada, las cargas explosivas sin causar daños al ecosistema de la región y a la población. Asimismo, los organismos de inteligencia establecieron una teoría donde los artefactos explosivos iban a ser utilizados en contra de la fuerza pública la cual realiza labores de erradicación de cultivos ilícitos en el territorio y de la población civil.
El comandante de la Cuarta División del Ejército, Antonio María Beltrán Díaz, aseguró que, durante el 2020, han sido ubicadas 900 minas antipersona y 148 artefactos explosivos en los departamentos del Guaviare y Meta. Este actuar de los grupos criminales, señala el comandante Díaz, es una violación a los Derechos Humanos y trasgrede el derecho internacional humanitario, por el uso de medios y métodos de guerra no convencionales prohibidos en los tratados y protocolos internacionales.
El comandante también indicó que, en la vereda Altamira, del municipio de Calamar, del departamento del Guaviare, las tropas de la Vigésima Segunda Brigada de la Selva realizaban controles en la vía y detuvieron a dos hombres que se movilizaban en motobicicleta. Los sospechosos portaban dos morrales con más de 4 kilogramos de pasta de base de coca. Al parecer, estaban al servicio de la misma estructura de las disidencias de las Farc-EP vinculada al sumergible. los hombres fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para su por el delito e tráfico, fabricación y porte de estupefacientes.
Néstor Gregorio Vera Fernández, alias ‘Iván Mordisco’, según InSight Crime, fundación dedicada al estudio del crimen organizado en Latinoamérica y el Caribe, tiene un accionar criminal de más de 20 años, cuando se unió a la guerrillas de las Farc-EP. Se inició como guerrillero raso, pero se especializó como francotirador y explosivista del Frente Armando Ríos en San José del Guaviare.
En el 2008 se desempeñó temporalmente como comandante del Frente Primero debido a la captura de alias ‘César’ y en 2009, se convirtió en jefe de campaña de orden público de este Frente guerrillero en los departamentos de Guaviare y Vaupés. En 2012, se dedicó al reclutamiento forzado y a protección de los cultivos ilícitos en estos departamentos. Pero sería en 2016, a través de una carta enviada al Secretariado de las Farc-EP en Cuba, que se consolidó como el comandante del Frente Primero. Aseguró que no entregaría sus armas e incentivó a las demás estructuras no vincularse al Acuerdo de Paz para “continuar con la lucha insurgente”.
Alias ‘Iván Mordisco’ también fue señalado de extorsionar a campesinos, comerciantes y agricultores en años previos. También presionó para aumentar la siembra, transformación y tráfico de coca en el departamento del Guaviare.