Autoridades estatales detuvieron este martes al líder de la banda acusada del asesinato de tres estudiantes de medicina, dos colombianos y un mexicano, junto a un conductor de Uber ocurrido el pasado mes de febrero en el central estado mexicano de Puebla.
Los funcionarios informaron de que en cumplimiento de una orden de arresto se detuvo a Felipe Hernández, alías “El Pirulí”, líder de la banda que presuntamente asesinó a las cuatro personas, el pasado 25 de febrero.
El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, aseguró en conferencia de prensa que esta detención es” de las más importantes que se han realizado en los últimos meses”, debido a que se aplicó la ley y se estarán estableciendo las responsabilidades correspondientes en este caso y otros más en los que tuvo participación. “Con esta detención capturamos a todos los asesinos que participaron en el secuestro y homicidio calificado de los estudiantes de medicina y el conductor”, agregó Barbosa.
La Fiscalía General de Estado de Puebla refirió que la captura ocurrió en la comunidad de Santa Ana Xalmimulco, en el municipio de Huejotzingo, dando cumplimiento a la orden de aprehensión en su contra por los cargos de homicidio y secuestro de las cuatro personas.
En un comunicado, la Fiscalía informo de que las indagatorias apuntan a que Felipe Hernández sería el líder de la banda responsable de los homicidios de los estudiantes. Esto en complicidad con Pablo Jesús “N”, de 46 años; Ángel “N”, de 23 años y Lisset “N” de 22 años, quienes fueron detenidos horas después de los hechos y están vinculados al proceso por los delitos de homicidio y robo de vehículo, además de permanecer en prisión preventiva.
El 25 de febrero de este año, las autoridades mexicanas hallaron los cuerpos de las cuatro personas con huellas de tortura en una carretera del centro de México tras asistir al carnaval de Huejotzingo, en el estado de Puebla.
Dos de los asesinados eran estudiantes de medicina de origen colombiano y respondían al nombre de Ximena Quijano Hernández, de 25 años, y José Antonio Parada Cerpa, de 22 años, quienes vivían en el estado Puebla en el centro de México como parte de un intercambio estudiantil. El tercer estudiante Francisco Javier Tirado, de 22 años, era originario del oriental estado de Veracruz y cursaba Medicina en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). El cuarto fallecido es Josué Emanuel, de 28 años, originario de Puebla y conductor de un vehículo que prestaba servicio de transporte Uber. Los crímenes generaron, en aquel momento, una ola de protestas en la ciudad de Puebla, capital del estado del mismo nombre, y en la Ciudad de México para exigir justicia para los tres estudiantes fallecidos y seguridad para los jóvenes.