La mañana de este 18 de noviembre, ocho meses después de lo que se tenía contemplado, el Concejo de Bogotá eligió como nuevo contralor distrital a Andrés Castro Franco, quien desempeñará el cargo entre enero de 2021 y el 28 de febrero de 2022.
Con 26 votos, de 43, en la plenaria del Concejo, Andrés Castro estará en cabeza de una Contraloría que este año manejó un presupuesto de $170.000 millones, además de una nómina de 1.045 empleados, de los cuales el 20 por ciento son de libre nombramiento.
Andrés Castro Franco, nacido en Pereira, Risaralda, es abogado y profesional en ciencias políticas, con especialización en Instituciones Jurídico-Procesales y maestría en derecho procesal penal.
Entre su experiencia sobresale haber sido contralor auxiliar del excontralor distrital Juan Carlos Granados, investigado por el caso Odebrecht, quien ejerció su cargo entre junio de 2016 y febrero de 2020. También laboró como delegado en salud de la Personería durante el periodo del personero Francisco Rojas Birry, condenado por el ‘carrusel de la contratación en Bogotá.
Justo estos antecedentes laborales fueron los que llevaron al Concejo de Bogotá a criticarle durante una sesión semipresencial desarrollada el pasado 17 de noviembre, en la que participaron los otros dos candidatos al cargo Héctor Julio Garzón y Carlos Enrique Campillo.
En esa sesión, en la que los aspirantes tenían un minutos para responder cada pregunta de los concejales, fue precisamente a Andrés Castro Franco a quién más se le indago. Fueron, en total, 20, en contraste con las siete hechas a Garzón y las 12 a Campillo.
Al nuevo contralor, le siguió en votos Héctor Julio garzón, con 13, y el voto en blanco (4). Solo quedaron excluidas de sufragar las concejales Susana Muhamad y María Fernanda Rojas, debido a las investigaciones que en la actualidad les adelanta la Contraloría.
La tardanza de casi ocho meses en la elección del contralor tuvo que ver con la imposibilidad de los aspirantes al cargo de presentar evaluaciones y entrevistas presenciales durante la pandemia, además de errores en las evaluaciones de algunos de los candidatos.