El impacto de la tormenta Iota en poblaciones como Cartagena, en el Caribe colombiano, fue literalmente desastroso. De acuerdo con el balance entregado la noche del sábado 14 de noviembre por el alcalde de la capital de Bolívar, William Dau Chamat, cerca de 155.000 habitantes quedaron damnificados por los aguaceros que inundaron el 70 por ciento de la ciudad.
El agua, que en algunos lugares les llegó hasta el cuello a los pobladores de la ‘heroica’, afectó de manera directa a 31.550 familias. Según el alcalde Dau, 33 barrios quedaron inundados, 22 colegios resultaron afectados y hubo decenas de árboles caídos. También presentaron 14 deslizamientos en la ciudad y, en las zonas rurales, hubo pérdidas de entre 50 y 100 hectáreas de cultivo.
Lo que más preocupa a William Dau y a los pobladores de Cartagena, además de los estragos y ocasionados por Iota, son las lluvias intensas que podrían agravar la situación. “Sería una tragedia humana”, señaló el alcalde.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) prevé que la tormenta pase a categoría de huracán entre la noche del 15 de noviembre y la madrugada del 16, hecho que afectaría en especial a las islas de San Andrés y Providencia, pero también a la capital de Bolívar y a los departamentos del norte del país; incluso a los de la región central.
Por el paso de Iota en el Caribe, el alcalde Dau declaró a la ciudad en calamidad pública, razón por la cual podrá contratar equipos especializados para la mitigación de riesgos y contará con el apoyo directo del Gobierno Nacional, que, según anunció el presidente Iván Duque, desplegará unidades de la Fuerza Pública para el apoyo a damnificados.
“Desde tempranas horas todos los equipos de todas las dependencias de la Alcaldía están dispuestos a entrar en acción para mitigar los efectos. El día de hoy estaremos decretando una calamidad por la fuertes lluvias y con eso podremos inmediatamente contratar equipos para mitigar los efectos”, afirmó Dau en la mañana del 14 de noviembre, previo a la firma del decreto.
Entre la medida por la emergencia sobresale la instauración de no uno, sino tres Puestos de Mando Unificado, así como la adecuación del Coliseo de Combates como albergue temporal de los damnificados.
Ante la emergencia, William Dau solicitó la colaboración en dinero para atender las necesidades de los damnificados en una cuenta de ahorro del Banco de Occidente 830-12551-4, a nombre del Distrito Turístico y Cultural de Cartagena de Indias.