El puente festivo del próximo fin de semana, que algunos tomarán como unas cortas vacaciones, para los campesinos de Cundinamarca representará la oportunidad de vender su cosecha de papa, esa que han tenido casi que regalar y que, durante la última semana, ha tomado protagonismo en el debate público nacional. La razón: la venderán en los peajes que comunican al departamento con el resto del país.
Los camiones de las empresas de licores y los vehículos dispuestos por la Gobernación de Cundinamarca serán los encargados de llevar a los pequeños productores, junto con sus cosechas, a los puntos de entrada y salida del departamento. Así lo manifestó el gobernador Nicolás García, quien hizo un llamado a la ciudadanía a contribuir con quienes ‘nos dan la papita’ en este momento de crisis.
A los colombianos, les pidió que “den un paso más allá de la indignación en redes sociales y ayuden, los invitamos a comprar la papita pal mercado y subir la foto a redes sociales”, fueron las palabras del gobernador de Cundinamarca.
Quienes piensen salir y entrar a la ciudad, podrán comprar a los campesinos la papa en bolsas de 5 kgm, así como por medio bulto y bulto, entre el viernes 13 de noviembre, a partir de las 6 a.m., y el lunes 16, hasta las 10 p.m.
Los puntos de venta, en los que bastará detenerse durante unos cinco minutos para realizar las compras, serán los peajes: Siberia calle 80, Chusacá (autopista Sur), Casablanca (Vía Ubaté), Albarracín- Villapinzón, Centro Agro Industrial de la papa (Villa Pinzón), Los Andes, El Roble (vía Gachancipá), Boquerón y Calle 13.
Piden aumentar el arancel para la papa
Entre las problemáticas que aquejan al sector, de acuerdo con los papicultores, y que los ha llevado a vender sus cosechas en las carreteras del país, sobresale la importación de tubérculos desde Europa, razón por la que pidieron al Gobierno nacional aumentar los aranceles.
Ante la solicitud del gremio papicultor de elevar los impuestos de importación a un 30 %, el Gobierno manifestó que, por ahora, se mantendrán. No obstante, el Ministerio de Comerció se comprometió a evaluar de manera quincenal la posibilidad de cambiar las medidas de protección comercial.
En la actualidad, los gravámenes están de la siguiente manera: en Bélgica a una empresa por 3,64 % y a otra por 8,01 %; a una firma alemana por 3,21 % y en Holanda a una compañía por 3,64 %, mientras que a las demás importaciones de ese país son por 44,52 %. Así, pues, el promedio es del 12%.
Una de las decisiones que tomó el Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, fue disponer $ 30.000 millones para pagar una compensación económica directa a los pequeños productores de papa afectados por los bajos precios causados por la sobreoferta del tubérculo y, según el gremio papero, a las importaciones.
Mediante el Programa de Apoyo a la Comercialización de Papa en Fresco, según el ministro de Agricultura, Rodolfo Zea, “un pequeño productor de papa que comercialice 10 toneladas podrá recibir hasta $ 1′240.000 de subsidio a la comercialización”.