Durante las manifestaciones que se dieron en Bogotá el pasado 9 de septiembre se conocieron videos en los que se veía a un agente de la Policía Nacional que, con un palo en sus manos, agredía a varios manifestantes en inmediaciones al Park Way, en la localidad de Teusaquillo.
En ese momento, fue difícil identificar al agente, porque este se colocó la chaqueta del uniforme al revés, lo que impedía ver su identificación; además, utilizaba casco y tapabocas, que no dejaban ver su rostro.
Dos meses después, se logró identificar al funcionario de la institución, José Orlando Velandia Otavo, denunciado en los videos, se capturó y, ahora, deberá responder por las agresiones a los ciudadanos. La noticia la dio a conocer este viernes la alcaldesa de la localidad de Teusaquillo, Esmeralda Hernández, a través de redes sociales:
Sin embargo, según fuentes de la Policía Nacional informaron al diario El Tiempo, este patrullero está preso desde el pasado 28 de septiembre de 2020 por otros hechos. La información compartida por el diario asegura que Velandia fue detenido y privado de su libertad en un cárcel tras una denuncia de acto sexual con una persona incapaz de resistir, privación ilegal de la libertad y lesiones personales agravadas.
Según información de la Fiscalía el patrullero habría cometido este delito en marzo de este año en el CAI El Claret, donde el patrullero habría mantenido actos sexuales con una menor de 14 años. El medio de comunicación aseguró que, en lugar de ser suspendido por este delito, a Velandia lo trasladaron al CAI del Park Way, donde, el pasado 9 de septiembre, fue grabado por varios ciudadanos agrediendo a los manifestantes de las marchas que se realizaban por esos días en contra de los abusos policiales.
Los videos que utilizaron los manifestantes para denunciar el abuso policial fueron claves para identificar a este Policía. Estas grabaciones también servirían como prueba clave para añadir un nuevo cargo al oficial, al que hasta ahora, no se le han imputado cargos por estos hechos de agresión.
Las denuncias dan cuenta de tres personas que fueron agredidas por el agente: un joven, al que le lastimó una mano con el palo; una mujer, a la que golpeó en el rostro con el objeto, y dañó el celular a otras personas, que estaban grabando la situación.
Las manifestaciones de ese entonces se dieron como rechazo al asesinato del ciudadano Javier Ordóñez a manos de dos policías. La jornada de protestas dejó 13 personas fallecidas y varios heridos, además, más de 100 denuncias por actos de abuso por parte agentes de la Policía Nacional.
“Tenemos evidencia por redes sociales, por análisis de cámaras de la Alcaldía Mayor, de que hubo disparos indiscriminados por parte de parte de miembros de la Policía. Hay evidencias claras de eso en por lo menos cuatro localidades: Verbenal, en Usaquén, aquí en Suba, en Kennedy y en Bosa”, aseguró la alcaldesa Claudia López en ese momento.
Cada denuncia por abuso policial que se realizó a lo largo de esa jornada fue asumida por la Procuraduría General de la Nación.
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