Hasta qué punto la denominada “Nueva normalidad” ha incidido en el cambio de comportamiento de los colombianos está reflejado en la tendencia de gasto reflejada en el pasado mes de octubre, cuando las medidas de desconfinamiento eran efectivas en el territorio nacional.
De acuerdo con el estudio realizado por la consultora Raddar, los hogares colombianos gastaron $61,5 billones de pesos, una cifra inédita si es comparada con desempeño de septiembre 2020, e incluso con el registro del año inmediatamente anterior: 3,25% con respecto al primer indicador y un 1,44 % superior a octubre de 2019.
¿La razón? En apariencia, los ciudadanos salieron a comprar en los centros comerciales, las grandes superficies y las tiendas, pero priorizando las adquisiciones ante la incertidumbre relacionada con la pandemia. Para Raddar, el gasto es un indicador de recuperación económica que permite seguir el comportamiento de dos variables vinculadas entre sí: el crédito y el empleo.
Según la consultora, la baja en la solicitud de créditos en el último mes tiene qué ver con la recuperación del poder adquisitivo ligado a la activación en el empleo. Por ende, los ciudadanos al contar con mayores recursos, gastan más, por lo que el comercio está en la primera línea de los beneficiados por la reactivación.
Este gasto se reflejó en distintos sub-sectores de la economía que iniciaron repunte en octubre, como salud 7,36 %, vivienda 3,46 %, educación 4,36 %, y gastos varios 3,62 %, que así mismo reflejan el comportamiento cauteloso de los colombianos luego de la cuarentena.
Esta manera de previsión afecta a otros sectores, como restaurantes y entretenimiento, que aún no abren por el riesgo que las aglomeraciones significan en momentos de pandemia. Para Raddar esta tendencia puede cambiar en cómo perciben los colombianos su gasto:"La composición del gasto de los hogares se vio afectada durante las fases de aislamiento, dándole mayor peso a los alimentos, hogar y gastos varios. Esta tendencia se ha revertido en los últimos meses con las aperturas y reactivación, mostrando que es posible que el bolsillo de los hogares no tenga grandes cambios en su composición", por lo que, en la medida en que los sectores reactiven y se contenga la pandemia, el gasto regrese a su constante histórica e incorpore sectores aún detenidos por la crisis.
Además, Raddar sostiene que la afectación del fenómeno de la Niña, que inició con fuertes lluvias en el país, será un elemento a considerar en los meses siguientes, por las consecuencias que el clima frío acarrea en el campo de las enfermedades respiratorias.
Con la llegada de la temporada de fin de año, la expectativa de un incremento sostenido es recibida con cautela. la consultora afirma que no alcanzará niveles de 2019, uno de los años con mejor registro para la economía colombiana, y que, dado el contexto, se sostenga con lo observado desde agosto. Análisis que coincide con los emitidos por otros sectores que, pese a la reactivación, son prudentes a la hora de proyecciones, como turismo y hotelería, éstos últimos favorecidos en las últimas semanas por la apertura total de los aeropuertos del país.