Días después de que las desmovilizadas Farc envió una controversial carta a la Jurisdicción Especial para la Paz -JEP-, asumiendo su responsabilidad en el asesinato del político conservador Álvaro Gómez Hurtado y de otros cinco homicidios que ocurrieron entre 1987 y 1995, el hijo de Horacio Serpa Uribe aseguró que su padre lloró de alegría al enterarse de la noticia.
La carta fue recibida por el tribunal de paz el 30 de septiembre de 2020 y está firmada por Julián Gallo Cubillos, Pastor Lisandro Alape Lascarro y Pablo Catatumbo Torres Victoria, y sus abogados. De hecho, Galló aseguró que fue él quien ejecutó la orden de asesinar a Álvaro Gómez.
El 5 de octubre, Horacio José Serpa en conversación con Blu Radio, narró el que sería el último llanto del político liberal tras su muerte este 31 de octubre.
“Junto con mi madre le contamos la noticia. Se le salieron las lágrimas. Me dijo: ‘Estoy feliz, estoy contento, llevo recibiendo palo injustamente más de 20 años por este tema tan absurdo’. Realmente todos nos pusimos emocionados, porque fue un bonito momento”, contó Horacio hijo.
El exministro Serpa le dijo a su hijo que es bueno ver que se empiece a conocer esa verdad, refiriéndose al magnicidio de Gómez Hurtado.
Un crimen sin resolver
En la fecha en que asesinaron al dirigente político, Serpa era el ministro del Interior de Ernesto Samper, a quienes señalaron de conocer un supuesto plan para asesinar a Gómez Hurtado ordenado por cartel del Norte del Valle.
La propia familia del conservador acogió esa tesis y aún cuando las Farc se atribuyeron el asesinato, en un comunicado señalaron que para ellos Samper y Serpa siguen siendo “los principales sospechosos del magnicidio”.
El expresidente hizo lo suyo y tachó a la familia de Gómez Hurtado de querer buscar un crimen de Estado para conseguir una indemnización millonaria por parte del Estado colombiano.
Frente a esa acusación de Samper, los familiares del conservador reiteraron que, aunque la reparación económica es un derecho fundamental, esto no ha sido “el propósito que anima nuestra causa (...) insinuar lo contrario, de manera perversa, es una revictimización que lesiona la memoria de Álvaro Gómez y ultraja a quienes llevamos 25 años luchando porque su crimen no quede en la impunidad: esa impunidad que tanto buscan los verdaderos autores intelectuales del magnicidio”.
A lo dicho por las Farc sobre el crimen de Álvaro Gómez le salió un contradictor, el disidente y prófugo de la justicia ‘Jesús Santrich’ quien señaló a través de un comunicado que “no es cierto que el ajusticiamiento de Álvaro Gómez Hurtado fuera ordenado por el Mono Jojoy”.
En el comunicado también dice que tampoco es verdad que alias Mono Jojoy, “le avisó al antiguo Secretariado de las Farc sobre el homicidio una vez el asesinato fue cometido”, ni que “a los pocos días, Manuel Marulanda (máximo exjefe de las Farc) orientó a todos que nos quedáramos en silencio”.
Por ahora el caso del magnicidio de Gómez Hurtado será investigado por la JEP, sin embargo, la Sala de reconocimiento del tribunal de paz aplazó la fecha de la diligencia de aporte a la verdad de Julián Galindo Cubillos alias Carlos Lozada, debido a un recurso de reposición presentado por la familia del líder conservador.