El senador de La U Eduardo Pulgar compareció ante la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia con motivo de una indagatoria en el proceso que se lleva en su contra por supuesto soborno al exjuez de Usiacurí, Atlántico, Andrés Fernando Rodríguez Caez.
A la sesión, que tuvo una duración de una hora, asistió el aforado con su apoderado, Jaime Granados, conocido por defender al expresidente Álvaro Uribe en el caso de presunto fraude procesal que se adelanta en su contra.
En los próximos días, el magistrado ponente, Marco Antonio Rueda, escribirá un documento en el que se planteará una manera de resolver la situación jurídica del senador Pulgar. Posteriormente, esta ponencia será debatida por los miembros de la Sala de Instrucción para determinar si se continúa con el caso, o si es archivado.
Según RCN Radio, en poder de la corporación se encuentran múltiples pruebas que sustentarían su responsabilidad en el soborno al juez Andrés Rodríguez. Fuentes relacionadas con el caso afirman que, además, habrían pruebas que lo implican en delitos de cohecho, tráfico de influencias y delitos contra la participación democrática.
Aparte de su responsabilidad ante la Corte Suprema de Justicia, la Procuraduría también adelanta un proceso disciplinario en contra del senador de ‘La U’ por el delito de cohecho. Incluso, por medio de una audiencia virtual, a principios de octubre, el Ministerio Público se opuso a que el caso terminara en la Comisión de Ética del Congreso.
“El Ministerio Público reprochó a Pulgar Daza el que hubiera incumplido sus deberes con la defensa de la legalidad y la promoción del bienestar general, con lo que habría atentado contra la dignidad y majestad de la justicia y su recta administración, al realizar el supuesto ofrecimiento económico para que el juez favoreciera con una decisión a Luis Fernando Acosta Osío, miembro del Consejo Directivo de la Universidad Metropolitana de Barranquilla”, señaló la Procuraduría por medio de un comunicado.
El ente de control disciplinario agrega que Pulgar no actuó bajo principios de probidad, moralidad y rectitud, los cuales deben regir las acciones de los funcionarios públicos. Según la institución, al intentar favorecer a Acosta Osío, Pulgar incurrió en delitos de presunto “cohecho por dar u ofrecer, como gravísima a título de dolo”.
‘200 barras’
“Si los manes son juiciosos, si yo le digo: ‘hey, doc, esta vaina vale 200 barras’, él me dice: ‘¿A qué horas y dónde?’. Así, pa' hablar claro. Yo les digo a ustedes la verdad. Aquí hay un negocio. Yo creo. No sé si ustedes quieren hablar solos”, se escucha en los audios revelados por el periodista Daniel Coronell, columnista del portal Los Danieles.
Según El Tiempo, el caso en el que Pulgar funciona como intermediario es la disputa por la herencia de Jacobo Acosta Bendek, que incluía el control de la Fundación Acosta Bendek, la Universidad Metropolitana y la Fundación Hospital Universitario Metropolitano.
Por esto, en 2018, la Fiscalía imputó cargos a directivos de estas entidades por concierto para delinquir, fraude procesal, falsedad ideológica en documento privado y obtención de documento público falso. Entre los imputados, se encuentra Luis Fernando Acosta Osío, para quien, supuestamente, sirvió de intermediario Pulgar.