Narcotráfico: la exportación de cocaína colombiana alcanza máximos históricos en Europa

Entre otros datos de interés sobre la dinámica de la droga, reporte subraya que la pandemia refinó la cadena logística de ingreso del narcótico al viejo continente, dominada por organizaciones criminales colombianas.

Guardar
La exportación de cocaína camuflada en productos vegetales, como el carbón, confirma que el mercado europeo está en demanda del narcótico.  October 20, 2020. REUTERS/Jorge Adorno
La exportación de cocaína camuflada en productos vegetales, como el carbón, confirma que el mercado europeo está en demanda del narcótico. October 20, 2020. REUTERS/Jorge Adorno

Con cifra récord de exportaciones de 1.137 toneladas de cocaína (a 2018), Colombia es el primer exportador del narcótico al viejo continente, según Reporte Europeo sobre Narcóticos 2020, un documento publicado por el Centro Europeo de Monitoreo para Narcóticos y Adicción a Estupefacientes (su nombre en inglés es European Monitoring Centre for Drugs and Drug Addiction, EMCDDA), que señala, además, que los narcos colombianos están aprovechando la pandemia para refinar métodos de logística que facilite la puesta de la droga en las calles europeas.

Mediante la utilización de contenedores, despachados por vía marítima, la operación no se ha resentido, pese a las restricciones de vuelos impuestas por las autoridades de extranjería de los países de la zona euro. La exportación por mar está en auge, como lo demuestra el aumento de incautaciones en el puerto de Rotterdam, el mayor de Europa y acceso de la coca al continente, que alcanzó las 25 toneladas en el primer semestre de 2020. El denominado “flujo de la cocaína” cuenta con el apoyo de una red de corrupción distribuida, de acuerdo con el reporte, entre funcionarios de nivel medio que actúan como auxiliadores del narcotráfico.

Pero no solo es la distribución la que llama la atención en el reporte, sino los precios al por mayor que confirman a Europa como un mercado apetecido por las organizaciones criminales.

Apoyado con cifras de la investigación realizada por la Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito (ONUDD), en Europa el kilo de cocaína es más alto que en Estados Unidos, con un precio final de US$42.000 por kilo, mientras que en Norteamérica la cifra ronda los US$28.000.

Autoridades colombianas detienen uno de los submarinos de coca, cuya meta es alcanzar Centroamérica para luego ser distribuido entre USA y Europa. Foto Cortesía Twitter Policía de Colombia, 2020:
Autoridades colombianas detienen uno de los submarinos de coca, cuya meta es alcanzar Centroamérica para luego ser distribuido entre USA y Europa. Foto Cortesía Twitter Policía de Colombia, 2020:

Aunque no establece una relación entre precio y calidad, el Reporte Europeo sobre Narcóticos 2020 subraya que las pruebas realizadas por las autoridades al material incautado alcanzan un 75% de pureza en una de cada dos muestras. Indicador “sin precedentes” para el consumidor europeo que está dispuesto a pagar más por un producto de este tipo. En cuanto a decomisos de cocaína en la Unión Europea, 2020 será un año de récords con un incremento que superará las 181 toneladas registradas en 2019.

En este panorama, los traficantes colombianos llevan la delantera en cuanto a logística y, como hecho inédito, procesamiento de la cocaína, dadas las facilidades tecnológicas disponibles en el viejo continente. En agosto 2020, durante la reapertura europea, fue noticia en los Países Bajos la redada policial que condujo al desmantelamiento del laboratorio casero más grande de la región, en cuyas instalaciones fueron incautados 10.000 mil litros de químicos y 100 kilos de base de cocaína. Los 14 trabajadores del laboratorio eran colombianos. Las autoridades se mostraron sorprendidas al descubrir que en las instalaciones había dormitorios y espacios recreativos para descanso entre la producción. El estimado diario fue de 200 kilogramos de cocaína, que traduce ventas de 6 millones de euros (o unos US$7 millones).

Foto de archivo. Un policía antinarcóticos camina entre paquetes de cocaína incautados en la ciudad de Cali, Colombia, 30 de junio, 2014. REUTERS/Jaime Saldarriaga.
Foto de archivo. Un policía antinarcóticos camina entre paquetes de cocaína incautados en la ciudad de Cali, Colombia, 30 de junio, 2014. REUTERS/Jaime Saldarriaga.

El Reporte concluye el consumo de cocaína en Europa presenta un incremento sostenido que no se debilitó durante la pandemia, además de contar éste con estrategias de distribución apoyadas en servicios de entrega domiciliaria (los populares “cokecabs”), pago en bitcoins o microtransacciones en la deep web, e incluso en videojuegos, éstas últimas más difíciles de detectar por las autoridades, y confirma que Colombia no es solo productor de cocaína de alta pureza, sino que se ha establecido en las cadenas de logística y distribución en su intento de dominar el segundo mercado más importante del mundo.

<mark class="hl_orange"><u>Lea más</u></mark>

Guardar