Por Carlos Andrés Cuevas
Mientras el Alto Comisionado de Paz, Miguel Ceballos, viaja al Cauca para reunirse con comunidades indígenas, los alrededor de 6.000 participantes de la Minga en Bogotá, además de ‘condenar’ al presidente Iván Duque, preparan sus movilizaciones en el marco del paro nacional.
Ceballos anunció el lunes que se reuniría en el suroccidente del país con líderes del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), pese a que algunos miembros de la organización se movilizaron hasta la capital, y este martes tomó un vuelo hacia el suroccidente del país. Según él, los encuentros fueron acordados antes de que la Minga indígena fuera convocada y tomara rumbo a Bogotá.
“Una cosa es reunirse en Bogotá en un escritorio y otra es reunirse con los propios resguardos en sus comunidades. No hacerlo sería no entender la comunidad indígena”, dijo Ceballos, agregando que, mientras la Minga no cambie la intención política de la reunión con el presidente, va a ser difícil entablar diálogo con él.
“Yo con mucho gusto cambio la agenda y la reprogramo si ellos me lo piden. El propio CRIC puede confirmar que cuando uno se compromete con los gobernadores indígenas tiene que cumplir”, dijo el Comisionado este martes a la W Radio. No obstante, ya viajó al Cauca.
La Minga, por su parte, cerró la entrada del Palacio de los Deportes de Bogotá a los medios de comunicación, pues se está preparando para apoyar las movilizaciones del 21 de octubre, según ellos. Además, toman un descanso luego de haber ‘condenado’ al presidente Duque durante su primera jornada de movilizaciones.
El 19 de octubre, luego de marchar desde la calle 63 con carrera 50 hasta la plaza de Bolívar, los líderes de la Minga leyeron un fallo condenatorio de 10 puntos contra el presidente Duque, en el que destacan la defensa de los pueblos y territorios indígenas. Durante toda la ‘condena’, en la tarima, ubicada frente al Capitolio Nacional, estuvo acomodada una silla vacía, en representación de las negativas del máximo mandatario del país al debate público propuesto por los manifestantes.
“El mandatario ha hecho caso omiso a las citaciones, omitido su deber legal y constitucional de escuchar las denuncias de los pueblos indígenas y de su situación de seguridad, por esta razón se le ordena enmendar y restituir los derechos ancestrales milenario de los indígenas a través del cumplimento de los Acuerdos de Paz”, pronunció Hermes Pete, consejero del CRIC, durante el evento.
La postura del Alto Comisionado de Paz de viajar a Cauca fue cuestionada por la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, en Twitter, donde publicó: “Señor Comisionado de Paz, con el mayor respeto, tal vez no se ha dado cuenta que la Minga indígena lleva una semana atravesando Colombia para venir hasta Bogotá. Llegó desde ayer a la ciudad. Marchó hoy. Todo de manera ejemplar y pacífica. Y ¿Ni así la ven? ¿Ni así la escuchan?”
La tensión entre el Distrito y el Gobierno nacional, sin embargo, no es solo de hoy, sino que se ha dado durante la última semana. El más reciente rifirrafe se dio a raíz de que, según López, le plantearon al Ministerio de Interior que trabajaran de manera conjunta para recibir a la Minga en la capital y esta cartera, en cabeza de Alicia Arango, se negó.
Pese a sus desencuentros, el MinInterior y el Distrito tienen plazo de hoy para ‘constituir una mesa de trabajo’ y tomar las estrategias necesarias para evitar la vulneración de derechos colectivos durante las movilizaciones de la Minga en Bogotá; sobre todo, de garantizar el cumplimiento de las medidas de bioseguridad para evitar los contagios por covid-19.
Así lo ordenó el Juzgado 40 Administrativo del Circuito, luego de negar la solicitud cautelar de urgencia que pretendía prohibir las movilizaciones de la Minga en la capital, presentada por los senadores del Centro Democrático Carlos Felipe Mejía, José Obdulio Gaviria Vélez y Fernando Nicolás Aráujo Rumié.