Procuraduría culmina con la etapa de pruebas en el caso por la muerte de Javier Ordóñez

El Ministerio Público escuchó testimonios de policías, amigos del abogado y peritajes de Medicina Legal y uso de armamento.

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Javier Ordóñez, el abogado que murió a asesinado por dos policías por el cual se desencadenaron las protestas en Bogotá.
Javier Ordóñez, el abogado que murió a asesinado por dos policías por el cual se desencadenaron las protestas en Bogotá.

La Procuraduría terminó de practicar las pruebas en el caso contra los expatrulleros Harby Damián Rodríguez y Juan Camilo Lloreda por la muerte del abogado Javier Ordóñez.

El 22 de octubre se presentarán los alegatos finales en el proceso para que la Procuraduría tome una decisión en el caso.

Con el testimonio de Víctor Novoa, docente policial y experto en el uso de armas de menor letalidad, como el táser, el Mnisterio Público terminó de escuchar los testimonios en el proceso contra los expatrulleros que responden por abuso de autoridad y por el homicidio del estudiante de Derecho.

El uniformado explicó que el armamento de menor letalidad solo se debe usar cuando es “estrictamente necesario”. Si el dispositivo se utiliza de la forma errónea puede generar lesiones", dijo Novoa.

El uso del táser es permitido en la clavícula, el pecho superior, oblicuos y zonas que tengan bastante masa muscular, no por ejemplo en la frente u otras zonas, declaró el experto.

“Si una persona ya está reducida, esposada y demás, ya se pierden todos los principios, ya no habría necesidad de generar descargas ya que la persona está indefensa”, dijo.

En medio de las audiencias, el expatrullero Lloreda renunció a su abogado y decidió representarse él mismo, pero no ha realizado preguntas ni cuestionamientos a ninguno de los testigos en el caso. En el proceso disciplinario, el patrullero Harby Damián Rodríguez rindió su testimonio, pero Lloreda se negó a hacerlo.

También declaró Wilder Salazar, amigo de Javier Ordóñez, quien lo acompañó en todo momento y supuestamente observo como fue golpeado dentro de las instalaciones del CAI de Villaluz.

También rindieron versión dos uniformados pertenecientes al CAI Normandía y quienes prestaron refuerzo para llevar a Ordóñez al CAI Villaluz y el perito que hizo la necropsia el abogado y que reveló que murió por una hemorragia en la que perdió 3 litros y medio de sangre y que se originó tras el estallido de uno de sus riñones que se produjo por un fuerte golpe de un tercero.

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