David Vélez: de emprendedor a banquero

Aunque cumplió ampliamente las expectativas en su paso por INSPIRATIC, el evento de networking para las fintech más importante de Colombia, con anuncios como apertura de vacantes laborales para reactivar la economía, y con cifras de crecimiento que superan los 25 millones de usuarios en la región, David Vélez, el banquero cuya estrategia facilita la apertura de cuentas con depósitos mínimos y una atención al cliente presencial, no se detiene en su ambición por ir un paso adelante en la economía digital.

Para ello aspira a construir un legado que consiste en “reinventar la manera en la que las personas utilizan y se relacionan con los servicios financieros, para devolverles el control de su dinero”, en lo que significa un giro en las formas tradicionales en las que operó la banca en los últimos años. Nubank, cuyo emblemático plástico morado será vista pronto en los establecimientos de comercio, no solo cuenta con cero costo de anualidad por manejo sino también con una tasa de ahorro alta para sus usuarios. Según reportes internos de la compañía, ha permitido que éstos ahorren US$1.500 millones en los últimos siete años.

Lo que en sí es un mérito para el emprendedor y banquero colombiano quien, en un principio, fue visto como un “cisne negro” en los medios económicos. En diálogo con Revista Dinero, Vélez afirmó que el hecho de ser colombiano incidió en la percepción que tenían de él en los principios de Nubank. Algo que, visto desde la distancia, lo motivó a persistir en la consolidación de su idea: “Me decían que la gente nunca iba a confiar en un banco digital, pero cada que pensaba en esos argumentos ganaba más convicción”.

Para ello Vélez estudió con atención el fenómeno del retail con Amazon en la década del noventa del siglo anterior, Netflix en el sector del entretenimiento por demanda y Apple en telecomunicaciones, antes de dar el salto. Además, tuvo en cuenta la vasta penetración de los teléfonos inteligentes en Brasil, lo que es una clave para el éxito de Nubank en las transacciones digitales realizadas desde este tipo de dispositivos.

Con este trasfondo, Vélez se asoció con otros dos emprendedores, sus socios Cristina Junqueira y Edward Wible, para fundar la compañía en 2013, cuyo desempeño en Brasil lo ubica como el sexto banco más grande de ese país y el banco digital más importante de la región. Además, Nubank puede presumir de romper un sistema cerrado en el que solo 5 bancos de ese país contaban con el 90% de los depósitos, seguros y préstamos, lo que facilitó su expansión en los años siguientes: Argentina, México, Alemania y Colombia.

Su llegada al país inicia con otra cifra: 20.000 solicitudes para la tarjeta de crédito Nubank. “De nosotros esperan mucho más que un banco tradicional, porque tenemos que construir confianza”, puntualizó Vélez ante el auge en medios sobre su producto emblema. Recalca que el futuro es digital, con un mínimo de mediaciones entre usuarios y productos y, tal vez, con la desaparición del dinero tal y como ha sido conocido hasta el momento.

Mientras este escenario ocurre, David Vélez sigue insistiendo en que más que un banquero es un emprendedor, y confía en que la alta tasa de penetración de los teléfonos inteligentes en Colombia, un 93% de la población cuenta con un dispositivo de este tipo, sea el motor de propulsión para que Nubank supere las expectativas que ha generado a tan solo días de su ingreso al mercado.