Sicarios asesinaron a “Beto” Rentería, el último gran capo del cártel del Norte del Valle

‘Beto’ Rentería ha muerto, y con él lo último del antiguo y poderoso Cartel del Norte del Valle. El otrora gran capo del narcotráfico colombiano fue baleado en una pequeña residencia del barrio Sajonia, en Tuluá (Valle del Cauca), estaba viejo y reducido, después de pagar largos años en una cárcel de los Estados Unidos.

Rentería llegó a ser el hombre más poderoso del Cartel del Norte del Valle, heredero del Cartel de Cali después de que los hermanos Rodríguez Orejuela negociaran el desmantelamiento de la organización a cambio de beneficios judiciales.

Carlos Alberto Rentería Mantilla, alias Beto, no estuvo de acuerdo con esta decisión y junto con otros mandos medios del Cartel de Medellín, como Orlando Henao alias 'El hombre del overol; Iván Urdinola Grajales, alias ‘El Enano’; Efraín Hernández Ramírez, alias ‘Don Efra’; Wilber Alirio Varela, alias ‘Jabón’; y Diego León Montoya Sánchez, alias ‘Don Diego’; entre otros narcos; fundó el Cartel del Norte del Valle.

En 2010 Rentería sería capturado en Venezuela, después de huir de las autoridades por largos años. En ese momento fue catalogado como “el último gran capo del Cartel del Norte del Valle”, ya que los otros jefes de la organización habían muerto o estaban capturados y el poder recaía sobre ‘Beto’.

En sus años de gloria se declaró jurado enemigo de Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela, antiguos capos del Cartel de Cali, contra los que libró una guerra frontal. Por su captura el Gobierno de los Estados Unidos llegó a ofrecer una recompensa de hasta 5 millones de dólares.

Sin embargo, para la fecha de su captura, el Cartel del Norte del Valle era más un conjunto de pequeñas facciones en disputa que una organización criminal unificada como en su momento lo fue el Cartel de Medellín y el Cartel de Cali, ya que historia estuvo plagada de guerras internas, paranoias y traiciones entre sus máximos jefes, lo cual contribuyó con su eventual desarticulación.

Tras su captura, lograda gracias a un informante que reveló su paradero en el vecino país de Venezuela, alias ‘Beto’ fue extraditado a los Estados Unidos, donde cumplió una condena de siete años por narcotráfico.

Después de este tiempo regresó deportado a Colombia en 2018 donde fue nuevamente fue capturado y enviado a La Picota. No obstante, desde ese entonces no se había vuelto a tener noticias de él, hasta este miércoles 16 de septiembre, en el que apareció baleado en un barrio de Tolú, al norte del Valle del Cauca, un lugar del que antiguamente había sido el amo y señor.

De acuerdo con las primeras versiones de las autoridades colombianas a ‘Beto’ le propinaron dos tiros en la cabeza cuando se encontraba visitando la residencia de unos conocidos en la calle 34 con carrera 24 del barrio Sajonia, de Tuluá.

Hasta el momento hay dos versiones, una que trascendió en medios de comunicación en la cual al excapo de 75 años le habría disparado un hombre armado que entró a la casa, lo encontró sentado en una cama y sin mediar palabra le disparó, causándole una muerte inmediata, luego habría salido de la casa y huido en una motocicleta.

La otra, recogida por El Tiempo de una fuente policial anónima, dice que los sicarios que mataron a ‘Beto’ aprovecharon que este se asomó a la ventana para dispararle desde la calle. Fueron dos tiros certeros a la cabeza.

Rentería llevaba una vida modesta y manejando un bajo perfil, se presentaba como un comerciante de la zona. Su cuerpo será trasladado a Cali, capital del Valle del Cauca, para practicarle la necropsia, mientras que las 3 vainillas calibre 9mm que fueron encontradas en la escena del crimen están siendo analizadas en un laboratorio de la Policía.

Aún se desconocen los móviles del asesinato.

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