Carlos Holmes Trujillo, quien se venía desempeñando como ministro de Relaciones Exteriores y canciller de Colombia ante Naciones Unidas, fue designado por el Gobierno de Iván Duque como nuevo ministro de la Defensa en plenas funciones, ocupando así la vacante que dejó Guillermo Botero tras precipitar su renuncia al verse cuestionado por su actuación en el polémico bombardeo a un campamento de disidencias que FARC donde murieron, según la cifra oficial de Fiscalía, ocho menores de edad.
Así la cartera de Defensa pasará a ser ocupado por un diplomático de carrera, que no solo ha sido Canciller, sino embajador en distintos países pero que también ha ocupado otros cargos ministeriales al estar frente a las carteras de Educación y del Interior, en pasados Gobiernos.
De 68 años, es oriundo de una familia con gran tradición liberal de Cartago, Valle del Cauca, y militó en este partido durante gran parte de su vida pública. En 1988 fue el primer alcalde electo por voto popular de Cali, capital de su departamento, y años más tarde fue escogido entre los representantes de liberalismo en la Asamblea Nacional Constituyente que proclamó en 1991 la actual Constitución que rige a los colombianos.
Holmes Trujillo volvió a Colombia a hacer parte del Centro Democrático, partido en le que se inscribió tras renunciar al liberalismo, y se ha destacado como una de sus figuras más notables. En 2014 aspiró como precandidato presidencial, pero el uribismo se decidió por Óscar Iván Zuluaga, del que terminó siendo fórmula vicepresidencial para hacerle frente, si éxito, a la reelección de Juan Manuel Santos.
En las pasadas presidenciales también buscó ser candidato, pero la nominación terminó siendo para el actual presidente Iván Duque, que sin embargo lo nombró como Canciller, cargo en el que se destacó por liderar el denominado “Grupo de Lima”, un frente unido de países que buscaba presionar diplomáticamente la salida de Nicolás Maduro del poder en Venezuela y consolidar la presidencia de Juan Guaidó.
Como Canciller también estuvo al frente de las denuncias hechas por Colombia ante la OEA y la ONU sobre la presencia de guerrilleros del ELN protegidos por el régimen venezolano y la petición a Cuba para que extradite a los cabecillas de esa guerrilla que todavía están asilados en su territorio pese a que el Gobierno levantó las conversaciones de paz que se desarrollaban en La Habana tras el atentado de los elenos a la Escuela de Cadetes de Bogotá en enero.
Su última acción desde la cancillería fue la abstención de Colombia en la votación contra el embargo de EEUU a Cuba en la ONU, un hecho histórico para la diplomacia colombiana que causó grandes cuestionamientos y críticas por el sector más liberal del país.
Desde el ministerio del Defensa, Holmes Trujillo tendrá la tarea de pacificar un país complejo y profundamente dividido, en el que cada día mueren líderes sociales y defensores de derechos humanos, con una fuerte crisis de orden público en el Cauca y con una cúpula militar cuestionada por su actuación en el bombardeo que terminó tumbando al ministro Botero, además de otros episodios como los de Dimar Torres Y Flower Trompeta, uno excombatiente de FARC y otro campesino, que han sido calificados como falsos positivos.
El presidente Iván Duque además le asignó la responsabilidad de mejorar los resultados en la lucha contra el narcotráfico, la erradicación de cultivos ilícitos, la desarticulación de las redes de narcotráfico, tener cifras récord en incautación de drogas y mejorar la seguridad ciudadana.
Claudia Blum, nueva Canciller.
Por su parte el Gobierno nombró a la exsenadora Claudia Blum como nueva Canciller para cubrir la vacante que dejó Carlos Holmes Trujillo al pasar a la cartera de Defensa.
Blum tiene 65 años y s e venía desempeñando como miembro de Diálogo Interamericano, un centro de análisis de políticas públicas con sede en Washington, Estados Unidos.
Estudió sicología en la Universidad del Valle, en Cali, ciudad donde nació. Tiene una maestría en Ciencia Política de la Universidad Javeriana de Bogotá.
En su vida pública ha sido concejala de Cali en dos periodos y congresista en cuatro. En 2005 fue la primera mujer en presidir el Senado de la República.